Así se refleja en los resultados remitidos este jueves por la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) en los que señala que sus ingresos se situaron en los 293 millones de euros, un 25,5% menos en comparación con los tres primeros meses del año anterior. Por su parte, su Ebitda fue de 14,2 millones, un 85% menos.

Según explicó la compañía, “estas cantidades reflejan el cierre gradual de la mayoría de los hoteles de la compañía en marzo, si bien incorporan, muy parcialmente, los impactos positivos de las de medidas de ahorro ya iniciadas a mediados” de dicho mes.

En este sentido, el consejero delegado de Meliá, Gabriel Escarrer, subrayó que “el devastador efecto de la pandemia Covid-19 sobre la industria turística ha sido especialmente directo e intenso, provocando lo que algunos medios internacionales han comenzado a denominar ‘la gran crisis turística’”. Así, afirmó que, en el caso de Meliá, “la crisis sanitaria ha provocado una caída drástica y progresiva del negocio, hasta culminar con el cierre de prácticamente todos los hoteles, salvo algunos hoteles de Asia Pacífico en países con una menor afectación”.

Sobre el futuro a corto plazo, la compañía indicó que no dispone “de información suficientemente sólida y fiable sobre la que pueda realizar estimaciones”, pero apuntó que el impacto sobre su actividad “será relevante, como en el resto de la industria, pero con la incertidumbre actual muy difícil de cuantificar”.