En esta pieza el juez considera que hay indicios para juzgar a Villarejo y a otras 13 personas por delito continuado de cohecho, tráfico de influencias, descubrimiento y revelación de secretos y falsedad en documento mercantil, así como a la mercantil Herrero y Asociados como persona jurídica.

El magistrado archiva la causa para otras cinco personas, entre ellos varios subordinados de Villarejo porque, según explica el juez en su auto, no ha quedado acreditado que recibieran dádivas por la información que proporcionaron a sus superiores sobre las personas perjudicadas, ni que conocieran la finalidad ilícita pretendida con ese acceso.

En su auto el juez argumenta que los hechos que han sustentado esta pieza se iniciaron cuando responsables del despacho de abogados Herrero y Asociados contrataron los servicios de Villarejo para investigar a antiguos socios y empleados que constituyeron un nuevo despacho. Estaban convencidos de que se servían de antiguos empleados de Herrero para filtrar información y sustraer así contratos de la cartera de clientes de esta firma de abogados.