Asens comenzó su segundo turno en el debate de la cuarta prórroga del estado de alarma admitiendo que los políticos habían “decepcionado a mucha gente” los últimos días, para a continuación realizar tres réplicas: al PP, a Vox y a ERC.

Al PP le dijo que si gobernara el expresidente Mariano Rajoy “quizás habría confinado a los pobres”, o no habría decretado confinamiento o habría hecho trabajar a todos los diputados y trabajadores de la Cámara.

A Vox que, si su presidente, Santiago Abascal, había centrado su discurso en el vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, es porque su única crítica al estado de alarma lo es al escudo social que a su entender no se estaría implementando sin él en el Ejecutivo, porque está al servicio de los poderes fácticos, y tachó de “delirante” su alusión a Paracuellos. “Es alucinante que vea golpes de Estado donde no los hay y sea incapaz de verlos donde sí los hubo”, se asombró en alusión al franquista.

Finalmente, al portavoz de ERC, Gabriel Rufián, le insistió en alabar la “fraternidad republicana” que ha venido representando en los últimos tiempos, le instó a “asumir contradicciones” para ser útil en política en lugar de “darse golpes de pecho”, y aventuró que, contra lo que él le había dicho en su intervención, había sido él quien se había sentido incómodo en la sesión.

Como ejemplo de contradicción, dijo que a él hay cosas que no le gustan del Gobierno o del partido: en concreto, no le han gustado “tantos militares en televisión” en las ruedas de prensa del Comité de Gestión Técnica del coronavirus; algo muy criticado por ERC

Asens atribuyó, citando supuestamente a otro dirigente de ERC, el no a la prórroga del Grupo Republicano a la ”tradición pendular” de la formación, priorizando alternativamente el eje nacional y el eje social, y terminó dando las gracias a EH Bildu, que se abstendrá hoy en lugar de votar en contra, por “no dejarse arrastrar por ERC, que se ha dejado arrastrar por Torra”. Pese a todo, terminó, dirigiéndose a Rufián, asegurando que el Gobierno y ERC están “destinados a entendernos”.