Previsiones macroeconómicas
La Airef avala el escenario macroeconómico del Gobierno, pero alerta del posible agravamiento si la crisis sanitaria se prolonga
- Señala la complejidad para hacer estimaciones en el contexto actual y pide al Gobierno más detalle sobre el impacto de las medidas aprobadas
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La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef) señaló este viernes que avala las previsiones macroeconómicas remitidas ayer por el Gobierno a la Comisión Europea en la actualización del Programa de Estabilidad 2020-2021, aunque al mismo tiempo alerta de “riesgos a la baja” por la posibilidad de que la crisis sanitaria del Covid-19 se prolongue o dé lugar a mayores daños en la economía.
En un comunicado, el supervisor aseguró que “el escenario macroeconómico remitido a esta institución por el Gobierno el pasado día 28 de abril es razonable en un contexto de gran incertidumbre económica, aunque alerta de riesgos a la baja referidos a la posibilidad de que se materialicen escenarios epidemiológicos más adversos o daños más persistentes en la capacidad productiva de la economía y el empleo que dificultarían la recuperación proyectada para la segunda mitad de 2020 y para 2021”.
De esta forma, la Airef resaltó que “el aval se realiza bajo los supuestos de que se cumplen las hipótesis realizadas por el Gobierno respecto a la evolución de la pandemia y de que las medidas de política económica consideradas en el cuadro macroeconómico son las aprobadas hasta este momento”.
Por otro lado, la autoridad independiente recordó que “la elevada incertidumbre provocada por la Covid-19 ha llevado a la Comisión Europea a permitir simplificar, de manera notable, los requisitos de información”, de forma que el borrador de escenario macroeconómico enviado por el Gobierno “hace uso de esta flexibilidad y limita el horizonte temporal a dos años (2020-2021)” y reduce el conjunto de variables que se ofrecen, además de no incluir la situación cíclica de la economía, “cuya estimación en las circunstancias actuales es muy incierta”, ni las cuentas de los sectores institucionales.
En este sentido, la Airef también indicó que no ha recibido “suficiente detalle sobre el impacto macroeconómico y presupuestario de las medidas implementadas por el Gobierno para hacer frente a la crisis” ni tampoco “el escenario fiscal ni el detalle de la valoración de las medidas aprobadas y su traslación al cuadro macroeconómico”.
“Este hecho, por un lado, dificulta la valoración de la consistencia de los cuadros macroeconómicos inercial y con medidas, y, por otro lado, impide evaluar la coherencia entre el escenario macro y fiscal”, afirmó en este sentido la institución presidida por Cristina Herrero.
Por ello, entre las recomendaciones de la autoridad figuran “la necesidad de que se sistematice el intercambio de información y se amplíe el detalle de los supuestos e hipótesis que se incorporan en el diseño del escenario macroeconómico del Gobierno”. También destaca que “ahora, más que nunca, resulta conveniente disponer de un mayor detalle del escenario inercial (a políticas constantes) ya que ello permite valorar con mayor exactitud el impacto estimado de las medidas adoptadas para hacer frente a la crisis”, y también considera “imprescindible acompañar el cuadro macroeconómico con el escenario fiscal de manera que quede garantizada la coherencia entre ambos”.
De esta manera, la Airef considera que, con la información disponible y asumiendo los supuestos del Gobierno sobre la intensidad y duración de la pandemia, “el escenario macroeconómico es factible” y “se sitúa dentro del rango de las previsiones elaboradas por la propia Airef y por otros organismos públicos y privados”.
Además, considera “que la contracción de la demanda interna y del empleo provocada por las medidas de distanciamiento social y la paralización de algunas actividades económicas, junto con la caída de las exportaciones en un entorno de recesión global, se reflejan en este escenario de manera razonable”.
Sin embargo, la institución asegura que “no se pueden descartar escenarios más adversos derivados, principalmente, de la intensidad de la recuperación”. En particular, destaca que “la especialización relativa de la economía española en las actividades de servicios más afectadas por las medidas de distanciamiento social, la elevada temporalidad que persiste en el mercado de trabajo y la mayor presencia relativa de empresas pequeñas, más expuestas a las restricciones financieras que las empresas de mayor tamaño, podrían complicar la recuperación”.
Por último, también apunta a que en el ámbito europeo “no se puede excluir la reaparición de tensiones en los mercados financieros y de deuda soberana que hasta el momento se han visto contenidas por la actuación de las autoridades monetarias”, aunque también reconoce que “el balance de riesgos podría cambiar de signo si se producen avances médicos que reduzcan el riesgo para la salud pública que representa el coronavirus”.
La autoridad independiente publicará la próxima semana su informe completo sobre la actualización del Plan de Estabilidad, aunque advierte que “a la dificultad para determinar la duración de la crisis sanitaria y el grado de normalización de la actividad económica que será posible alcanzar una vez se controle la pandemia, se suma la ausencia de indicadores suficientes para acotar su impacto económico, así como la falta de información sobre algunos aspectos específicos, como la incidencia de los instrumentos de flexibilización de las relaciones laborales y, en particular, de los ERTE, que resulta esencial a la hora de determinar la incidencia de la crisis sobre el mercado de trabajo”.
(SERVIMEDIA)
01 Mayo 2020
IPS/ecr