El turismo interno sufrió una caída del 5,1%, mientras que los viajes al extranjero crecieron un 5,8%.

Según Familitur, el buen comportamiento de los viajes al extranjero obedece al incremento en las visitas a familiares o amigos y a los viajes de ocio. También fueron más numerosos los viajes por motivos de trabajo, en consonancia con los aumentos observados en el sector exterior.

El tipo de alojamiento principal fue el extrahotelero, donde la vivienda de familiares o amigos fue la más demandada, con un peso cercano al 36%.

Los establecimientos hoteleros cerraron el año con un ligero descenso cercano al 1%, mientras se produjo una fuerte caída de los viajes a la vivienda propia, motivada por el descenso de los viajes de fin de semana a la segunda residencia.

En relación al tipo de viaje, los más numerosos fueron los realizados en fin de semana, pues supusieron casi el 50% del total. A más distancia, con un peso cercano al 13%, se situaron las vacaciones de verano.

A pesar de que el coche sigue siendo el medio principal de transporte, destaca en 2010 el avión que acumuló un crecimiento conjunto del 9,3%.

En diciembre, se produjo un incremento interanual del 3,6%, lo que sitúa los viajes realizados en aproximadamente 13 millones.

Por destinos, los viajes internos crecieron, mientras que las visitas al extranjero descendieron. Esta caída fue la única del año para los viajes emisores y tiene su explicación en el paro provocado por los controladores aéreos en los aeropuertos españoles en el puente de diciembre.