En concreto, ayer se registraron 402.647 viajes en la red de transporte público de la Comunidad de Madrid, lo que supone 3,6 millones de viajes menos que en la Semana Santa de 2019.

El descenso ayer lunes, respecto a hace un año, fue del 90,7% en el caso de Metro de Madrid, que sumó 161.550 viajes. La EMT registró un descenso del 90,1% y 116.446 viajes. Las líneas de autobuses urbanas e interurbanas del Consorcio registraron un descenso del 88,6% y 73.845 viajes; y la red de Renfe Cercanías, un descenso del 90,4% y 50.786 viajes.

Hoy martes, Metro de Madrid registró en la hora punta de la mañana (entre las 6:00 y las 8:00 horas) 23.781 viajeros, un 84% menos con respecto al mismo tramo horario de hace un año.

La Consejería de Transportes, Movilidad e Infraestructuras, a través del Consorcio Regional de Transportes de Madrid, ha adaptado la oferta de transporte público a la caída en el número de viajeros derivada de las medidas extraordinarias aprobadas por el Gobierno regional y el resto de administraciones.

Con este ajuste, la oferta de transporte público se sitúa en los días laborables en niveles similares a los existentes en un fin de semana.

Con esta adaptación de la oferta, la Comunidad de Madrid garantiza la movilidad necesaria de los trabajadores pertenecientes a los sectores esenciales, así como la prestación de un servicio público esencial para los ciudadanos.

El Consorcio Regional de Transportes mantiene un seguimiento continuo de la marcha del transporte público en la región, por lo que los ajustes se podrán ir modificando según la evolución de la demanda en el conjunto del sistema.

En el marco de las medidas y recomendaciones que está adoptando para evitar contagios por coronavirus, la Comunidad de Madrid recuerda la necesidad de que los ciudadanos permanezcan en sus domicilios.

En todo caso, y si el desplazamiento es estrictamente necesario y está dentro de los supuestos previstos por las autoridades en el actual estado de alarma, aconseja a las personas mayores y a quienes padecen alguna enfermedad que eviten, por motivos de salud, utilizar el Metro y el transporte público en general. Esta recomendación de las autoridades sanitarias se hace extensiva a sus cuidadores y a quienes conviven con estos sectores de población vulnerable.