Según el documento elaborado por el grupo de expertas del Convenio de Estambul (Grevio), estos países no reconocen en sus documentos oficiales y políticas la vulnerabilidad de las mujeres en la “violencia doméstica” al no hacer distinción entre hombres y mujeres.

Esto provoca “un fallo a la hora de reconocer esta violencia como un mecanismo social que perpetúa a las mujeres en una posición de subordinación frente al hombre”, recoge el informe, que asegura que este abordaje provoca que “muchas mujeres víctimas se tengan que enfrentar a que el maltratador siga teniendo custodia y derecho de visita” sobre los hijos.

Asimismo, el grupo de expertas también afea a otros países como Portugal o Austria que no incluyan la “violencia económica” como una de las formas de violencia sobre las mujeres, como dicta el artículo 3 del Convenio de Estambul.

No obstante, las expertas aseguran estar “agradecidas” por el hecho de que “muchos países” hayan reforzado sus políticas sobre violencia de género para adecuarlas a lo dispuesto en el convenio internacional.

Aun así, el informe reconoce que aún existen carencias en los servicios a víctimas de violencia machista y que sus presupuestos son “extremadamente volátiles”. Además, reprocha que en muchos países aún no existen centros de crisis para víctimas de agresiones sexuales, y recordó que el Convenio de Estambul compromete a los países a “criminalizar” todo acto sexual sin el consentimiento de la mujer.

A juicio del grupo de expertas, aún existen países que mantienen “deliberadamente una narrativa falsa” sobre la violencia de género contrarias a lo que establece la convención.