Laboral

Fedea calcula que el 46,9% de los trabajadores está afectado por el cierre de la actividad y cree que algunos ERTE se convertirán en despidos

MADRID
SERVIMEDIA

La Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea) ha calculado que unos 9,2 millones de trabajadores estarían afectados por las medidas del decreto de alarma y el confinamiento total, lo que supone el 46,9% de los ocupados, y advierte de que parte de las suspensiones de contratos que se están produciendo hoy serán despidos tras cumplirse los seis meses de mantenimiento del empleo.

En un estudio sobre la afectación en el empleo de las medidas adoptadas por la crisis del Covid-19, Fedea estima que entre 3,3 y 3,6 millones de trabajadores se habrían visto afectados por la declaración del estado de alarma, y si se suman los impactados por pertenecer a servicios no esenciales que ya no pueden trabajar la cifra se elevaría a unos 9,2 millones de trabajadores, el 46,9% de los ocupados.

De este volumen, 5,4 millones de personas tenían contrato indefinido, 2,1 millones con contratos temporales y 1,7 millones eran autónomos.

Fedea considera que, desde una perspectiva laboral, “la crisis del coronavirus estalla en el peor momento posible del año”, puesto que el periodo entre marzo y junio ha sido tradicionalmente el momento del año en el que se registraban los mayores volúmenes de contratación y el paro registraba su mayor descenso estacional. Es, además, el período en el que se observan las mayores tasas de transición del desempleo al empleo de las personas que no están cobrando prestaciones.

Por otra parte, utilizando los últimos datos, de 2018, de la Muestra Continua de Vidas Laborales, a 14 de marzo de 2018 casi 1,7 millones de ofertas se dejaron de recibir por las comunidades autónomas.

Según Fedea, si se produjera una reactivación de la economía, el flujo de contratación que no está ligado a la estacionalidad también se reactivaría siendo mayor que el que se produciría en una situación ordinaria.

Sin embargo, advierte de que es posible que se acumulen bajas “masivas” de trabajadores que hubieran sido despedidos en una situación ordinaria y que finalmente no lo han sido por las restricciones y los incentivos, y las bajas de los directamente afectados por coronavirus. “En los meses posteriores al final del plan de choque puede registrarse un número importante de bajas con un posible aumento del desempleo”, según la organización, que calcula que puede haber más de un millón de trabajadores desprotegidos por el shock de la crisis sanitaria.

Por otra parte, Fedea cree que es “poco probable” que todos los sectores experimenten una reactivación simultánea, y que algunos padecerán una crisis de forma prolongada. Para estos casos pide planes de choque específicos una vez finalizado el estado de alarma. Cita el sector turístico, que verá los efectos mientras existan posibilidades de contagio, así como sectores relacionados con el ocio y con las exportaciones.

Por ello, agrega que “parte de los ERTE de hoy, se convertirán en ERE una vez transcurrido el plazo de los seis meses de mantenimiento del empleo” al que obliga el decreto del 17 de marzo.

(SERVIMEDIA)
01 Abr 2020
MMR/gja