“No me da tiempo a ver todos los rumores y todas las especulaciones que salen a diario. Estoy dedicada a trabajar día y noche y no dedico ni un segundo a este tipo de habladurías y de rumores”, zanjó en declaraciones a Telecinco recogidas por Servimedia al ser cuestionada si existen enfrentamientos duros con Iglesias sobre las medidas a aplicar y si su escalada alcanzó tal punto de haber llegado a amagar Calviño con dejar el cargo.

“Aquí estamos todos al pie del cañón. Los ciudadanos lo que quieren es un Gobierno unido que esté pensando en el bienestar general y en eso es en lo que es yo estoy y creo que no hay que perder el tiempo en otras cosas”, agregó.

Al ser preguntada de manera específica si en la rueda de prensa de ayer posterior al Consejo de Ministros intervino tras exponer algunas medidas Iglesias para tranquilizar a los mercados y a la patronal, Calviño lo negó taxativa: “No, yo creo que somos un equipo que nos complementamos y las medidas son las que están en el Real Decreto-Ley, no hay ninguna duda al respecto”.

Según narró, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, le encargó que coordinase la respuesta económica a la crisis y es lo que ha hecho en los “numerosos reales decretos-ley”, además de estar coordinando las medidas con los agentes sociales.

Calviño detalló que el real decreto-ley de ayer ha sido un trabajo “coral” de once ministerios, incluyendo al vicepresidente segundo. “Y creo –dijo- que hemos transmitido los dos el mismo mensaje de que estamos estableciendo una red de seguridad, un escudo social”.

La vicepresidenta indicó que el objetivo final es limitar el impacto de la crisis y que, sobre todo, no afecte a las personas más vulnerables. “Queremos salir todos juntos de esta las crisis, que nadie se quede atrás y todos tenemos que arrimar el hombro y todos estamos arrimando el hombro”, afirmó citando también los esfuerzos de empresas, trabajadores, los autónomos y todos los ciudadanos y familias para “salir lo más fuerte posible de una situación que es excepcional y que, por supuesto, tiene un impacto económico y social negativo”.

De la misma manera y ante las críticas de los partidos de la oposición de no estar siendo consultados, Calviño defendió que el Gobierno está “desplegando” todos los contactos y “todas nuestras antenas” y también con sindicatos, empresarios, con las comunidades autónomas y con autoridades y responsables europeos.

Sin embargo, reconoció que “a veces decisiones exigen una rapidez que no es posible hablar” como ocurrió el pasado domingo cuando, por consejo de las autoridades sanitarias, se decidió ir más allá en las medidas de restricción para aprovechar la Semana Santa a fin de frenar de forma decidida la propagación del Covid-19. Calviño pidió “eliminar” las dudas con contacto porque la situación requiere contar con los apoyos, “porque es el momento de remar todos en la misma dirección”.