La decisión afecta principalmente a su red comercial de tiendas en España, así como a trabajadores de su centro logístico en Lliçà d’Amunt y de sus oficinas centrales en Palau-Solità i Plegamans.

En un comunicado, explica que la rápida expansión del Covid-19 ha forzado hasta la fecha el cierre de 1.695 puntos de venta en 72 países, lo que representa el 78% de su parque mundial. Entre ellas, destacan las más de 400 tiendas que tiene en España como consecuencia del estado de alarma decretado por el Gobierno de Pedro Sánchez para frenar los contagios.

Para "minimizar" el impacto causado en los colaboradores afectados por el ERTE, Mango tiene la intención de complementar su salario hasta un máximo de 2.000 euros en el mes de marzo. Además, todos aquellos bonos e incentivos devengados durante el mes de marzo se pagarán al finalizar el mes.

Además, toda la dirección de la compañía "ajustará significativamente su retribución mientras dure esta situación de excepcionalidad", comenzando por el consejero delegado, Toni Ruiz, que ha decidido renunciar a cualquier tipo de retribución durante este período.

“Nuestra prioridad es garantizar los puestos de trabajo de todos nuestros colaboradores. Con este objetivo, adaptaremos nuestras capacidades y estructura a las circunstancias que requiera cada momento para poder recuperar la normalidad lo antes posible”, ha asegurado el consejero delegado.