Por este asunto fue preguntado esta mañana en La Moncloa el director adjunto operativo de la Policía Nacional, José Ángel González Jiméñez, quien compareció junto a los otros expertos que hacen seguimiento de la crisis sanitaria. Por parte del Ministerio del Interior también participó en esta rueda de prensa el director adjunto operativo de la Guardia Civil, Laurentino Ceña.

Respecto al CIE de Aluche, González indicó que este martes se produjo un “pequeño motín” en este centro, en el que unos 20 internos se subieron al tejado para protestar “por la situación sanitaria” y pedir que se les deje en libertad para evitar que se contagien por el Covid-19.

A este respecto, el director adjunto operativo de la Policía señaló que “no hay ningún caso de coronavirus” en el centro de Aluche, en referencia a que los amotinados puedan esgrimir esta cuestión para reclamar que se les ponga en libertad.

88 DETENIDOS DESDE EL SÁBADO

En este sentido, de forma general, González explico que la ley estable un plazo “máximo” de 60 días para que un extranjero este confinado en un CIE, plazo que dijo la Policía siempre intenta no agotar. Añadió que, por este motivo, están estudiando “caso por caso” y que se pondrá en libertad a aquellas personas que cumplan los requisitos.

Por otra parte, González y Ceña informaron de que sus cuerpos de seguridad han detenido a 88 personas desde el pasado sábado al no acatar el estado de alarma por la crisis del Covid-19. En concreto, la Policía ha arrestado a 73 personas y la Guardia Civil a 15, en todos los casos por no acatar la cuarentena impuesta por el estado de alarma.

En cuanto al control de las fronteras terrestres de España, acordado esta semana por el Gobierno, el director adjunto operativo de la Policía informó de que, en general, “no ha habido ningún problema ni graves retenciones”. Además, este cuerpo de seguridad ha ejecutado 834 denegaciones de entrada en el país y ha efectuado dos detenciones. Por su parte, la Guardia Civil se está desplegando en las carreteras secundarias próximas próximas a la frontera para colaborar en el cierre de las entradas terrestres.