Así lo demandó a través de un comunicado en el que precisó que lleva años denunciando la “falta crónica” de enfermeros en las residencias públicas de mayores dependientes de la Agencia Madrileña de Atención Social (AMAS) y que esta carencia es “particularmente grave” como consecuencia de la pandemia, dada la falta de enfermeros en la región.

A este respecto, el delegado de Satse Madrid en el AMAS y enfermero en una residencia pública de mayores, Recesvinto Valiente, explicó que la situación es “crítica”. “Faltan enfermeras y no pocas y la realidad es que las residencias públicas de mayores, que dependen del AMAS, están en una situación inaceptable por la falta de enfermeros”, agregó.

A ello se une la “ausencia casi total” de Equipos de Protección Individual (EPIs), básicos para prevenir contagios entre los usuarios de estos recursos puesto que estos profesionales pueden convertirse en “foco de transmisión del Covid-19 y la propagación en una residencia es rapidísima”, advirtió.

Valiente afirmó que hay residencias “donde están mal y en otras, peor” y denunció que no hay “ninguna donde no falte material”. “Las enfermeras tienen que buscarse por sus propios medios algunos elementos de protección, ya que nadie de la Consejería se lo facilita”, criticó.

El representante de Satse aseveró, por otra parte, que la administración “no está siendo transparente en cuanto a la información sobre los profesionales contagiados o en aislamiento preventivo”.

Además, admitió que hay “miedo” no sólo entre los residentes, todos población de riesgo, “sino también entre los propios trabajadores que tienen familia e hijos a los que temen contagiar” y están “totalmente desprotegidos”.

Valiente puntualizó que hay enfermeros con síntomas leves que pudieran ser compatibles con los producidos por el Covid-19 pero, pero, ante la ausencia de pruebas que lo certifiquen, “siguen trabajando y cuidando de los residentes en estas residencias públicas de mayores” por lo que lamentó que el sindicato pide “que se hagan pero no se realizan”.