“Nadie será desahuciado en esta crisis”, afirmó el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros que aprobó este martes el que consideró como el real decreto ley “mayor aprobado en la historia de la democracia” con medidas sociales y económicas.

En esa norma figura, entre otras medidas, la moratoria en los pagos que, como indicó, tendrá especial acento en aquellas personas que se encuentren en “situación de especial vulnerabilidad” y vean disminuidos sus ingresos por la situación excepcional que atraviesa el país.

En su conjunto comentó que se movilizarán “hasta 200.000 millones de euros”, casi el 20% del PIB, para encarar el desafío que presenta la crisis sanitaria y mitigar su efecto sobre las empresas, los trabajadores, autónomos y familias.

España seguiría así los pasos de Italia, que acordó una moratoria similar para los hipotecados que sufriesen pérdidas en sus ingresos por culpa de las medidas excepcionales arbitradas para superar la emergencia sanitaria.