En el texto, que advierten de que llevarán también a la Junta de Portavoces, las formaciones firmantes, entre las que destaca la ausencia del PNV, manifiestan su "apoyo y solidaridad" con Borràs y su jefa de prensa y denuncian "los insultos, intimidaciones y amenazas de los policías del sindicato ultra Jusapol contra las electas y electos de diferentes formaciones independentistas y de izquierdas".

Más en general, estos grupos consideran "muy grave que se haya permitido a los manifestantes ultras de Jusapol rebasar el cordón policial y bloquear las entradas y salidas del Congreso de los Diputados, profiriendo

amenazas con las caras tapadas con pasamontañas y máscaras, con grilletes, petardos y bengalas, y vertiendo amenazas explícitas como 'somos la Policía y la Guardia Civil, vais a tener guerra', generando una situación de auténtica tensión".

"Nos parece inadmisible que esta actuación se haya podido llevar a cabo no solo con la pasividad de la policía encargada de la seguridad del Congreso y las unidades desplazadas para la custodia de la manifestación, si no con su connivencia", prosigue la queja. "Nunca antes a ningún colectivo se le había permitido manifestarse de esta manera, ni a pensionistas, trabajadores o taxistas, por lo que consideramos que existe un claro trato de favor de la policía para con sus compañeros".

Los firmantes subrayan el apoyo de lo que llaman "ultraderecha política" a los manifestantes y llaman a "poner freno a estas actitudes de acoso y amenaza constantes" contra electos de fuerzas independentistas y de izquierdas.

Por todo ello, requieren a la Mesa del Congreso a que "explique los criterios aplicados y el trato de favor mostrado con Jusapol que no se ha tenido con otros colectivos" y "exija las correspondientes responsabilidades a los servicios del Congreso por permitir esta grave situación y por su negativa para facilitar que la diputada Laura Borràs pudiese abandonar el Congreso con seguridad".

Por último, instan a que la Mesa tome medidas para que "los ataques continuados de la ultraderecha contra determinados electos y electas, ya sean estos dentro o fuera del hemiciclo, cesen de inmediato".

La propia Borràs presentó ayer una serie de preguntas al Gobierno y un escrito a la presidenta de la Mesa, Meritxell Batet, en el mismo sentido que el texto con el que el resto de grupos soberanistas, Más País y Compromís se han solidarizado con ella.