Calvo-Sotelo ostentó este cargo bajo gobierno del PP y con José Manuel Soria como ministro de Industria. Los hechos investigados dentro de la 'operación Hanta' tienen relación con las subvenciones concedidas al grupo de manera presuntamente irregular por importe de 48,8 millones de euros entre los años 2011 y 2015.

Dentro de esta causa se investiga la quiebra de Zed, propiedad de Javier Pérez Dolset. La Fiscalía Anticorrupción cree que se habrían podido producir delitos de administración desleal, insolvencia punible, fraude de subvenciones, falsedad documental, tráfico de influencias, coacciones y amenazas.

Es precisamente dentro de la investigación del delito de tráfico de influencias donde se enmarca la declaración del exsecretario de Estado, una persona clave dentro del Ministerio de Industria dirigido por Soria, cuya gestión en relación a esta empresa está bajo sospecha.

En concreto se trata de tres expedientes para la concesión de ayudas públicas que en un principio estaban denegados por no cumplir los requisitos necesarios para su concesión y que, finalmente fueron aprobados con la firma de Calvo-Sotelo.