Así lo dijo Sánchez Llibre en declaraciones a los medios de comunicación tras mantener un encuentro con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que se encuentra en Cataluña por segundo día consecutivo, tras reunirse ayer con el presidente de la Generalitat, Quim Torra, y hoy con la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, entre otros encuentros.

Tras valorar la llamada mesa de diálogo entre el Ejecutivo central y el catalán que se reunirá en este mes, Sánchez Llibre enunció una serie de peticiones al Gobierno de Sánchez relativas a una fiscalidad “competitiva”, al entender que “las empresas no pueden, en estos momentos, soportar más presión fiscal”.

El presidente de Foment consideró que los impuestos “no tienen que ser confiscatorios” y abogó por suprimir el de Patrimonio y por una armonización fiscal entre territorios.

También pidió que los Presupuestos Generales del Estado (PGE) contemplen inversiones en infraestructuras y acciones como crear un consorcio entre el Estado y la Generalitat para la gestión de los cercanías de la comunidad.

Del mismo modo, confió en que, si se modifica la reforma laboral, se haga con diálogo social, y apostó por “potenciar la marca Barcelona” de cara a los Juegos Olímpicos de 2030.