Laboral
Fasga y CSIF reivindican un sindicalismo “independiente” que sea “la antítesis del populismo”
VÍDEO: los clientes de Servimedia disponen de imágenes y sonido de estas declaraciones en el enlace http://bit.ly/SindicalismoFasga
El texto se ha copiado correctamente en el portapapeles
La Federación de Asociaciones Sindicales Fasga y la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) reivindican un sindicalismo “independiente” del Estado, “profesional” y que sea “la antítesis del populismo”.
Así lo pusieron de manifiesto el secretario general de Fasga, Miguel Venegas, y el presidente de CSIF, Miguel Borra, en un encuentro organizado por Servimedia sobre el sindicalismo independiente, que contó también con la participación del exsecretario general de Empleo en los gobiernos de José María Aznar y exdirector de Recursos Humanos de Bankia, Juan Chozas, y la vicepresidenta de la Asociación de Periodistas de Información Económica (APIE), Amparo Estrada.
Venegas defendió que el modelo de Fasga se basa en la “independencia política, empresarial y económica” y más del 97% de sus ingresos proceden de la cuota de los afiliados, con lo que “nos debemos única y exclusivamente a los trabajadores”.
Fasga actualmente está presente en 13 sectores, de los cuales en Grandes Almacenes y Agencias de Viajes tiene mayoría de representación. Desarrolla su acción sindical en 53 empresas, entre otras El Corte Inglés, Carrefour, Lidl, Asepeyo, Tous, Globalia o Avoris.
Su máximo responsable puso de relieve que “hay una desafección en el mundo sindical tradicional muy importante que nos está afectando a todos” y argumentó que los trabajadores hoy buscan un modelo sindical “con mucho sentido común, que es la antítesis del populismo” y “profesional”. En el caso de Fasga, puso en valor que tiene 20 afiliados por cada delegado, mientras que CCOO y UGT "apenas llegan a los diez" y eso "genera una desafección brutal".
Según Venegas, los sindicatos de clase han reducido su presencia del 80% en los inicios de la democracia al 66% hoy, de manera que “uno de cada tres trabajadores con representación en España no responde a las dos grandes centrales sindicales históricas”. Sin embargo, indicó que con menos de dos millones de afiliados "representan a 19 millones" de ocupados en España.
Además, señaló que hay unos 80.000 delegados sindicales de las organizaciones tradicionales que “son fantasma” porque no pierden dicha condición pese a proceder de empresas que desaparecieron.
En esta misma línea se expresó el presidente de CSIF, para quien la Ley Orgánica de Libertad Sindical, aprobada en 1985, “consagra siempre derechos para los dos grandes sindicatos que estaban entonces” y desde entonces no se ha modificado. CSIF pide que el umbral para tener representación se rebaje del 10% al 5% para poder dar acceso a otras organizaciones, y esta petición la trasladará este lunes a la ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, en una reunión.
CSIF considera que “en España hay millones de trabajadores que no tienen elecciones sindicales, que no están representados” y los dos mayoritarios “se arrogan la capacidad de hablar por todo el mundo cuando no la tienen”. Tiene mayor presencia en el sector público y en el privado va adquiriéndola y ya cuenta con representación en la cadena Makro o en las centrales nucleares de Almaraz y de Trillo.
Chozas agregó que el modelo sindical español “prima mucho” a las grandes centrales porque en la Transición, ante una situación económica “muy delicada” y conflictividad social y política, se optó por tener pocos interlocutores y “ayudarles a crecer”. Así, con una afiliación aproximada de un 13% en los dos sindicatos de clase, “la cobertura de la negociación afecta al 80% de los trabajadores, cosa que no es habitual en el resto de los países europeos”.
Según Chozas, se debe modificar la ley sobre representatividad sindical, pero reconoció que es “muy difícil” llevarla a cabo teniendo en cuenta “las alineaciones que hay en el marco político parlamentario”. Este ex secretario general de Empleo adujo que no solo existe un “problema” de representación sindical, sino también de representación empresarial, dado que solo existen las patronales CEOE para grandes empresas, y Cepyme para medianas y pequeñas.
Desde la APIE, su vicepresidenta apuntó que “ahora hay muchísimos autónomos, muchísimos jóvenes que tienen trabajos más precarios y que a lo mejor no se encuentran representados en los sindicatos tradicionales”. Además, consideró que históricamente se ha negociado únicamente las subidas salariales y alguna medida laboral.
(SERVIMEDIA)
08 Feb 2020
MMR/pai/gja