Así se pronunció la jefa de la diplomacia española, en una entrevista en RNE recogida por Servimedia coincidiendo con el día en que se materializará el ‘Brexit’, un hito histórico que fijó como la fecha en la que comenzará la “reconquista” de los “corazones británicos” que no creen en la UE.

Este viernes el Reino Unido saldrá de la UE tras 47 años de pertenencia al club comunitario. Tras la confirmación del 'Brexit', se iniciará un periodo transitorio que culminará el próximo día 31 de diciembre, con posibilidad de prórroga de uno o dos años que tiene que ser solicitada por el Reino Unido antes del 1 de julio.

El primer ministro británico, Boris Johnson, ya ha comentado que no piensa solicitar dicho periodo de prórroga, pero en el seno de la UE se considera imposible alcanzar un acuerdo de tamaña envergadura en menos de un año. De hecho, algunos Estados miembros, España entre ellos, creen que las negociaciones podrían ser más largas, poniendo como ejemplo el hecho de que los acuerdos de libre comercio con Canadá y con Mercosur se fraguaron tras 9 y 15 años de negociaciones, respectivamente.

Durante las negociaciones sobre el acuerdo de salida, la UE consideró fundamental el mantenimiento de los derechos de los ciudadanos y de los operadores económicos -3,5 millones de europeos viven en el Reino Unido y 1,5 millones de británicos residen en suelo comunitario- tras el 'Brexit'. Y ese objetivo se ha logrado, como lo evidencia el hecho de que todos los ciudadanos registrados, al igual que quienes se registren en ese tiempo, conservarán intactos sus derechos el resto de su vida.

También se mantendrá incólume el reconocimiento de las cualificaciones profesionales y el mecanismo de protección de la propiedad intelectual. A su vez, no se producirán modificaciones en materia de pesca ni de seguridad y política exterior.

Por su parte, el Reino Unido no podrá celebrar nuevos acuerdos con terceros sobre materias exclusivas de la UE durante el periodo transitorio, salvo autorización expresa de Bruselas.

PERIODO TRANSITORIO

La ministra auguró que la negociación sobre la relación futura de la UE y el Reino Unido “no será fácil”, aunque aseguró que el éxito de la misma dependerá de dos cuestiones: el nivel de ambición y la cooperación que estén dispuestos a establecer ambas partes.

González Laya no rehuyó las dificultades que esta negociación tiene por delante, más si cabe desde el momento en que el secretario de Estado de EEUU, Mike Pompeo, ha verbalizado ya el interés de su país para acordar un acuerdo de libre comercio con el Reino Unido.

Sobre este particular, quiso dejar claro que Londres no podrá celebrar acuerdos con terceros países mientras dure el periodo transitorio y desdramatizó las ambiciones británicas al considerar normal que busque la “complicidad” de Washington. No obstante, aseveró que la negociación sobre la relación ‘postbrexit’ no será “entre amigos” porque cada una de las partes tiene intereses contrapuestos que defender.

Por su parte, González Laya destacó que a partir de hoy “Europa será más pequeña”, pero el Reino Unido, dijo, lo será más al dejar de formar parte de un club supranacional con 510 millones de habitantes y verse obligado a defender a sus 60 millones de ciudadanos “solos” en un “mundo hostil, complejo y en mutación”.

La ministra consideró que el ‘Brexit’ ha actuado como un “virus” contra los ultranacionalismos, ya que se ha impuesto la razón en aquellos países que en el pasado se sintieron tentados de seguir el ejemplo británico. “Han visto lo duro que es estar fuera en un mundo en el que llueve y hasta graniza”, dijo.

GIBRALTAR

La ministra defendió que el Gobierno ha hecho un “esfuerzo particular” para que la relación entre Gibraltar y España cuente con un protocolo anejo dentro del acuerdo de retirada. Este protocolo menciona los cuatro memorandos de entendimiento sobre el Peñón firmados el 21 de noviembre de 2018 (derechos de los ciudadanos, tabaco, cooperación en materia ambiental y cooperación en materia policial y aduanera), y el referido acuerdo fiscal.

Esto le sirvió para dejar claro que este protocolo será la base que guiará su acción en lo referido al Peñón en las negociaciones sobre la relación futura. Por ello, anunció que en breve se desplazará al Campo de Gibraltar para conocer las inquietudes de los actores de la comarca.

González Laya eludió pronunciarse sobre si España aspira a conseguir la cosoberanía de Gibraltar, puesto que la discusión sobre los “grandes principios” puede llevar al olvido los intereses cotidianos de los habitantes de los ciudadanos. Por ello, proclamó la intención del Gobierno de conseguir que el entorno del Peñón sea una “zona de prosperidad compartida”.

Por último, adelantó que se desplazará próximamente a Londres para “encauzar, de manera sosegada pero decidida”, la relación futura con las autoridades británicas.