Este estudio, publicado hoy, ha sido realizado por el Grupo de Expertos en Violencia Doméstica y de Género del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), con la colaboración de Miguel Lorente.

En el informe se analizan las sentencias dictadas en casos de homicidios y asesinatos consumados en el ámbito de la pareja o ex pareja de los que son autores hombres o mujeres.

En este sentido, 43 de las 45 sentencias fueron condenatorias (el 95,5%). En las dos restantes (el 4,5%) se estimó que concurría una circunstancia eximente completa de la responsabilidad criminal del acusado, que derivó en internamientos psiquiátricos.

La gran mayoría de los homicidios y asesinatos ejecutados en el ámbito de la pareja o ex pareja son, en lo fundamental, violencia de hombre contra mujer, y el resto, una minoría, violencia de mujer contra hombre, ya que, según el estudio, en 41 de las 45 sentencias analizadas (el 91%) los autores fueron varones, y en las 4 restantes (el 9%), mujeres.

La de prisión es la pena principal impuesta en todos los casos, con una media de 18 años de pena privativa de libertad en los casos de asesinato, y de 12, en los de homicidio.

Según las sentencias analizadas, el 57% de los autores son de nacionalidad española y el 43%, extranjeros. Estos datos reflejan un descenso de 15,5 puntos en el porcentaje de autores españoles. En cuanto a las víctimas, la mayoría son españolas frente al 32,5% de extranjeras, si bien también se aprecia un descenso de 4,5 puntos en el porcentaje de víctimas nacionales.

Para sus acciones, los agresores emplean en su mayoría un arma blanca (46,3%), si bien también hay casos de estrangulación (4,8%), arma de fuego (7,3%), traumatismos dirigidos a la región craneal (9,7%), precipitación (7,3%) y fuego (4,9 %).

En las sentencias estudiadas se han apreciado seis circunstancias modificativas que han atenuado la responsabilidad criminal del autor: la de confesión, la de actuar a causa de la adicción al alcohol o a las drogas, la de reparación del daño, así como las de arrebato, dilaciones indebidas y la de haber actuado concurriendo problemas con el control de la ira.

En el 31% de las sentencias analizadas, se constata que existía un vínculo matrimonial. Un porcentaje inferior a los casos en los que la relación afectiva era de convivencia de hecho, el 44%.

El domicilio común, el de la víctima o el autor, continúa siendo el principal escenario de la agresión

MONTALBÁN

Antes estos datos, según una nota de prensa del CGPJ, la vocal de este organismo y presidenta del Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género, Inmaculada Montalbán, afirma que se evidencia que la mayoría de las víctimas mortales son mujeres que tienen o han tenido una relación de pareja con su agresor. “La cifra es muy similar a la de años anteriores” y “un incremento del número de agresores/victimas de nacionalidad extranjera, con el consiguiente descenso de casos entre parejas de nacionalidad española, algo que venimos observando de forma sistemática desde que iniciamos este tipo de estudios”, puntualizó.

La presidenta sostiene que “gracias a este tipo de estudios se puede constatar la aplicación de la Ley, cómo se está desarrollando el fenómeno de la violencia de género e intentar actuar en el ámbito de la prevención”.