Lo hizo a su llegada a la jornada final del debate de investidura, en declaraciones que reafirman la que fue su apuesta cuando formaba parte de Podemos: hacer presidente al socialista Pedro Sánchez, aunque entonces habría sido un Gobierno con Ciudadanos o bien apoyado o consentido por la formación naranja.

Por lo demás, Errejón pidió al PP, Vox y Cs que “tengan deportividad” y acepten el Ejecutivo progresista. “Están en su perfecto derecho de que no les guste pero es un Gobierno perfectamente legítimo y tienen que tener buen perder”.

Al Ejecutivo le recomendó que haga “menos caso a los aspavientos e insultos de las fuerzas reaccionarias” y descartó una sorpresa de última hora, augurando que la investidura saldrá adelante aunque “de manera muy ajustada” y recalcando que los tres votos de Más País y Compromís serán “absolutamente decisivos”.