Estos datos continuarían la ralentización en el ritmo de crecimiento de creación de empleo y de reducción del paro, tras el aumento del empleo en un 2,2% en 2019 y la rebaja del paro al 14,2%.

En cuanto al crecimiento de la economía, Asempleo estima que en 2020 será del 1,7% y espera que “la demanda interna vuelva a recuperar el protagonismo en el crecimiento, con un patrón más acorde con la posición en el ciclo de la economía española”. En este sentido, prevé que “el dinamismo de la renta disponible permitirá que el consumo avance a un ritmo superior al de 2019, mientras que las condiciones financieras seguirán suponiendo un apoyo para la inversión”.

El presidente de Asempleo, Andreu Cruañas, destacó que “al acercarse el final de año, se produce un contraste entre los resultados agregados en términos de empleo y de reducción del paro, que siguen siendo muy positivos, y la coyuntura más reciente, que genera cierta inquietud de cara al futuro”.

Así, resaltó que “la actividad real parece haberse estabilizado en torno al 2%, tras unos meses desde el verano de abrupta desaceleración” por lo que la patronal estima que “esta dinámica va a llevar a la economía española a un crecimiento muy cercano al considerado como potencial”.

“Tras los vaivenes del consumo privado y la volatilidad de la inversión en bienes de equipo ante las olas de incertidumbre comercial, el año que viene probablemente traerá un comportamiento más estable, aunque en clave de desaceleración”, indicó Cruañas.