De los jóvenes atendidos, el 30% eran españoles y el 70% inmigrantes. Casi la mitad (el 46%) sienten ansiedad o depresión y presentan un bajo nivel de autoestima, "una de las mayores barreras para conseguir empleo y autonomía", indicó Cruz Roja. Sin embargo, cerca del 60% de los atendidos habían trabajado en algún tipo de empleo a pesar de su juventud.

Más del 50% de ellos vive en pisos compartidos, donde han aprendido a autogestionarse y a desarrollar conductas de convivencia. No obstante, un 10% "se ve obligado a vivir en la calle o en situación de alta precariedad". El 55 por ciento no tiene a nadie a quien acudir o que le exprese afecto o cariño.

El programa integral de apoyo a la emancipación de Cruz Roja proporciona ayuda para conseguir un empleo, vinculado en muchos casos a la regularización de los documentos; apoyo para seguir estudiando; ayudas económicas y para la vivienda; acompañamiento social; formación profesional; asesoramiento jurídico, y apoyo psicológico.