En la rueda de prensa posterior al Comité Ejecutivo Nacional, Cospedal quiso dar por reproducida y asumida "en su integridad" aquella declaración de Rajoy en 2006, escenificando así que nada ha cambiado tras el comunicado hecho público este mediodía por ETA en el que decreta un alto el fuego permanente, general y verificable por la comunidad internacional.

En aquella declaración del PP en 2006, leyó la hoy número dos del partido, se decía que "lo único" que ETA debía transmitir a la sociedad era "el anuncio de la disolución" de la banda y "el fin de sus actividades criminales". "Esto es lo importante y eso es lo que no se ha producido", lamentaron los populares, entonces como ahora.

Según Cospedal, este alto el fuego que se anuncia "por quinta vez en los últimos años" supone "una pausa, no una renuncia a su actividad criminal", así como su "voluntad de seguir existiendo", dado que "no se arrepiente y no pide perdón por nada". Además, pretende "iniciar un proceso que conduzca al objetivo de la autodeterminación, el objetivo de siempre", y "de nuevo nos pone las condiciones de siempre".

"NINGÚN PRECIO POLÍTICO"

De acuerdo con lo que dijo el PP entonces y reitera ahora, "no se puede pagar ningún precio político para el cese de una actividad terrorista, porque eso supondría convertir el terrorismo en un instrumento para hacer política", de tal modo que los terroristas "habrían conseguido 30 años después el objetivo para el que han asesinado a muchísimas personas" en el País Vasco y el resto de España.

Para la dirigente popular, "todo lo ocurrido desde 2006" reafirma que "lo único válido" para acabar con ETA es "la acción del Estado de derecho". "La esperanza de la sociedad vasca", insistió, "no radica en ningún comunicado", sino en la acción de los Cuerpos de Seguridad, el sistema judicial, la colaboración internacional y el Estado de derecho.

El PP, añadió, "va a estar muy vigilante" en las elecciones locales y forales para "impedir por todos los medios a nuestro alcance que ETA se presente a las elecciones". Igualmente, dijo que los populares no van a admitir "de ninguna manera" en un Estado democrático y de derecho "que alguien imponga condiciones a la paz" ni la actuación de mediadores internacionales.

En esa línea, Cospedal reiteró que el Estado, igual que en 2006, "debe seguir cumpliendo sus obligaciones". Y si entonces el PP se declaró "dispuesto a colaborar con el Gobierno para derrotar a ETA en el marco del Pacto por las Libertades y contra el Terrorismo", y "para que el Estado no no pague ningún precio político", hoy Cospedal aseguró que los populares serán "exigentes y constructivos" en la demanda de que "no vale" ningún comunicado de ETA que no sea para "anunciar su disolución" y pedir perdón a las víctimas.

Preguntada por las palabras del vicepresidente primero del Gobierno y ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, quien calificó de "buena noticia" el comunicado de ETA, aunque no sea "la noticia", Cospedal corroboró que cualquier día sin muertos es "una buena noticia", pero descartó que ello suponga una modificación de su análisis.

Según informaron fuentes del PP, el presidente del PP vasco, Antonio Basagoiti, y el portavoz de Justicia del partido, Federico Trillo, estuvieron en contacto con Rubalcaba tras conocerse el comunicado de la banda.