Según informó la Agencia Tributaria, los funcionarios de Vigilancia Aduanera de este organismo localizaron dos viviendas en el madrileño barrio de Vallecas, en una de las cuales se encontraba el laboratorio, mientras que la otra se empleaba para distribuir la droga.

Los investigadores aprovecharon la llegada a España de un envío de metanfetamina procedente de EEUU para iniciar el operativo de entrada en la vivienda que alojaba el laboratorio, aprovechándose el mismo para detener al receptor de la droga, ante el temor de que pudiera destruir pruebas.

En el registro del piso se encontró droga ya elaborada, restos de metanfetaminas y los rudimentos necesarios para su elaboración. También se descubrieron hasta cien kilos de sustancias químicas utilizadas para procesar el producto, como ácido clohídrico, tolueno, acetona y sosa cáustica, recluidas en botes industriales.

La organización investigada introducía en España la metanfetamina por vía aérea, oculta en ladrillos de construcción, utilizando diversas direcciones de entrega para eludir los controles de los investigadores.

La mercancía procedía de México y se enviaba a EEUU para su posterior introducción en España. En la investigación, que sigue abierta, han participado las autoridades aduaneras de EEUU y el Laboratorio Central de Aduanas de la Agencia Tributaria.

El precio de la metanfetamina en el mercado negro habría alcanzado una cifra aproximada de 8,8 millones de euros, unos 40 euros por gramo.