Movilidad
El tren emite entre un 30 y un 70% menos de CO2 que los coches convencionales
- Según un estudio de Oliver Wyman
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Los trenes emiten entre un 30 y un 70% menos de CO2 que los automóviles convencionales, mientras que un pasajero que se desplaza en tren emite 14 gramos de dióxido de carbono por kilómetro, en comparación a los 285 gramos emitidos si se desplaza en avión, según un estudio de Oliver Wyman publicado este miércoles.
En el informe se recoge que cada vez son más los ciudadanos en Europa que piden desincentivar los vuelos para distancias cortas si hay una alternativa de viaje en tren. Una tendencia que no solo afecta al transporte aéreo, si no al transporte en general: “el 92% de los conductores de automóviles cambiarían voluntariamente su modo de transporte al transporte público, como el tren, si se les garantiza el acceso a servicios de movilidad inteligente que hagan que su tiempo de viaje al trabajo sea útil y agradable”, señala el estudio.
“La movilidad urbana se encuentra en un proceso de cambio continuo, con la afluencia de nuevas tecnologías y modos de transporte, que podrían socavar el papel del tren y, en general, del transporte público en las ciudades”, indicaron desde la compañía.
Conforme al estudio, durante la próxima década, "muchas ciudades asistirán al desarrollo de coches autónomos, drones, aparcamientos inteligentes e incluso un sistema completo de gestión de tráfico conectado y digitalizado” por lo que “es necesario anticiparse y diseñar un modelo en que coexistirán las nuevas soluciones de movilidad con el transporte público”.
En el estudio también indica que, incluso con el aumento de vehículos eléctricos para ayudar a reducir la contaminación, las calles de la ciudad carecen de suficiente capacidad para absorber todos los viajes generados por personas, a lo que se une la explosión del comercio electrónico.
“Un tercer acontecimiento que representa un problema para la congestión urbana es el rápido aumento tanto del número de personas que viajan en coche propio como la circulación de vehículos de movilidad bajo demanda, a pesar de la tan discutida aversión de los ‘millennials’ y la generación Z a poseer automóviles en propiedad”, puntualizaron.
Por ello, Oliver Wyman refiere que “algunas ciudades han intentado desalentar el uso de vehículos, pero no siempre con éxito”.
Singapur ha impuesto precios por congestión, además de una política para encarecer y limitar el número de automóviles en propiedad, con el compromiso de incentivar el uso del transporte público. Como resultado, Singapur tiene una tasa de propiedad de automóviles significativamente inferior que la de Estados Unidos (11% frente al 80%), y que Europa (50%). “Tal vez y no por casualidad, la ciudad cuenta con uno de los mejores y más asequibles medios de transporte público”, concluyeron.
(SERVIMEDIA)
11 Dic 2019
EOM/ecr