Serra manifestó, en rueda de prensa, que la clausura de las centrales nucleares también restaría competitividad a las empresas españolas.

Además, indicó que esta medida provocaría que se dejararan de generar los ecursos económicos necesarios para gestionar los residuos radiactivos.

El secretario de Estado señaló que el Gobierno no apoya el cierre de instalaciones que están amortizadas, en referencia a las centrales más antiguas, dado el perjuicio económico que ello entraña.

Respecto a la posibilidad de sustituir con fuentes renovables la producción energética de origen nuclear, apuntó que en la actualidad las fuentes alternativas no pueden cubrir la totalidad de la oferta.

PSOE e IU defienden el ciere inmediato de las dos centrales más antiguas, Zorita y Garoña, y la adopción de un plan de clausura del resto de centrales, que se desarrollará en un periodo de 15 años.