12-M. AZNAR DENUNCIA LA "EMPANADA MENTAL" DEL PSOE Y PIDE QUE NO SE PONGA EN RIESGO LA COHESION DE ESPAÑA

LICANTE
SERVIMEDIA

El presidente del Gobierno, José María Aznar, denunció hoy la "empanada mental" del PSOE en relación al diseño del Estado y pidió que no se hagan propuestas que pongan en riesgo la cohesión de España.

En un acto celebrado en el polideportivo muncipal de Alicante ante unas 4.000 personas, Aznar defendió la necesidad de "mantener la estabilidad institucional" y huir de "frivolidades" que puedan atentar contra la integridad de España, en referencia a las propuestas hechas eneste sentido por el PSOE.

"Queremos gobernar España, no lo que quede de España", dijo Aznar en referencia a las distintas propuestas de organización territorial hechas por el PSOE. "Estan hablando de confederación, están hablando de federalismo simétrico o asimétrico, que es lo mismo que decir que tienen una empanada mental, que no saben distinguir lo que quieren de verdad", dijo.

A su juicio, el "barullo" de propuestas que están significando los distintos acuerdos a los que ha llegado el PSOE co otras fuerzas como IU o ERC constituyen una "irresponsabilidad" que el los socialistas están obligados a aclarar al electorado.

Para el líder del PP, las propuestas hechas hasta ahora por los socialistas en materia de organización territorial son "un grave error", "una frivolidad" y "un disparate" que hay que conjurar.

Aznar pidió "cuatro años más" para seguir impulsando el verdadero progreso que comenzó en 1996 con la llegada al gobierno del PP. En este sentido, dijo que "no nos hace falta esa olección de progresistas sietemachos incapaces de demostrar cuál es el progreso real".

Acusó al PSOE de hacer una política negativa orientada a un pasado que fue "un chollo" para ellos, y advirtió que hay "mucho progre de boquilla, pero los resultados los ponemos nosotros".

El candidato a la reelección del PP reiteró en varias ocasiones durante su discurso la petición de que "no se ponga en riesgo lo que tanto ha costado conseguir" ni se "vuelva al pasado" en un momento crucial para España que sóo podrá salir airosa con la garantía del "proyecto de centro" que representa el PP.

Aznar insistió en que la modernización de España se ha producido en los últimos cuatro años y puso como ejemplo que sólo en 1998 se consiguió alcanzar el nivel de ocupación que había en España en 1976.

Prometió una vez más la rebaja del Impuesto sobre la Renta y de los tributos a las pequeñas y medianas empresas e insistió en que su prioridad para los próximos años será reducir las altas tasas de desempleo juvenily femenino con la creación de 1,4 millones de nuevos empleos hasta el año 2003.

CAMPAÑA ALEGRE Y MOVIDA

El presidente del Congreso y candidato número uno por Alicante, Federico Trillo, pidió a todos los presente que no respondan a los insultos de la oposición, porque ése "no será el estilo de ninguna de las candidaturas del PP".

"La raíz de la valentía es la serenidad", dijo antes de recomendar a los simpatizantes del PP "que nadie descomponga la figura, que nadie se inquiete con los insultos, i pierda el tiempo en contestarlos".

En su intervención, agradeció a Aznar que le haya dado la posibilidad de ver realizado "el más alto sueño" de un político, que es presidir el Congreso de los Diputados.

Advirtió, además, a todos los presentes que las elecciones del 12 de marzo "no están ganadas" y que el éxito depende "sobre todo de vuestro trabajo y capacidad de convicción", pero también del diseño de una campaña que, prometió, será "movida y alegre".

Por su parte, el presidente valenciao, Eduardo Zaplana, incidió sobre el hecho de que ésta es la primera ocasión en que una legislatura finaliza en los plazos máximos previstos por la ley cambiando "la política de sorpresas por la del rigor, la seriedad y la tarea bien hecha".

Zaplana comparó los proyectos del PP y los del PSOE. Aseguró que algunos, cuando hablan, "sólo se refieren al pasado, mientras que a nosotros nos gusta hablar del futuro", pero en especial destacó que después de cuatro años de gobierno popular los ciudadanos que aoyaron al PP en 1996 "pueden salir a la calle, mirar a sus vecinos a la cara y decir: yo contribuí a la etapa de mayor prosperidad de España".

A su juicio, el proyecto del PP para España no está concluido y es necesario una victoria para ponerse "al servicio de la gente". "Sería pobre, triste y ruin pensar que esto es un coto cerrado" en el que las luchas internas son el mecanismo que se usa para "mantener el poder interno", como ocurre en la oposición.

Finalmente, argumentó que el PSOE se está aoyando en "discursos antiguos" basados en enfrentar derecha e izquierda y que, a su juicio, "no tienen sentido en la España moderna".

(SERVIMEDIA)
11 Feb 2000
SGR