Desde Sant Joan Despí (Barcelona), Ábalos dijo que la cita del 10-N “va de segunda vuelta y en la segunda vuelta, los accidentes que nos acompañan no cuentan. Esto va de los de verdad, de los que pueden hacer gobierno: no hay más alternativa que la del PSOE y una coalición entre PP y Vox, no voy a citar a Ciudadanos porque no sé cuántos habrá en ese momento”.

El dirigente socialista habló de la “descomposición” de la formación que lidera Albert Rivera e ironizó de que no saben gestionar sus victorias en las elecciones. Por un lado, dijo, ganaron en Cataluña con Inés Arrimadas y optó por huir “una a Madrid y el otro a Toledo, que es más imperial”, en alusión al catalán Juan Carlos Girauta que ahora lidera la candidatura por la capital manchega.

CS EN DESCOMPOSICIÓN

Por otro, aludió a que los de Rivera fiaron las pasadas elecciones en lograr el 'sorpasso' al PP y liderar la derecha. Pese a que estuvieron muy cerca, en lugar de afrontar ese caudal se lo dieron sin más a los populares para que el PP se hiciese con gobiernos autonómicos. "Ya podría hacer lo mismo" Podemos, ironizó.

Precisamente, Ábalos arremetió también contra Unidas Podemos "que va diciendo por ahí que el PSOE quiere alcanzar un acuerdo contra el Partido Popular, tras el 10-N". A su juicio, es fruto de “la mala conciencia” que les corroe por no haber alcanzado un pacto con el PSOE.

También les afeó que se autodenominen como la verdadera izquierda. “La izquierda no se hace en el Twitter sino en el BOE. Nosotros somos izquierda porque hacemos izquierda” mientras los de Pablo Iglesias optaron por dar “otra oportunidad a la derecha”.

UTILIDAD DE PODEMOS

El secretario de Organización del PSOE criticó las reticencias de Podemos por la exhumación de Francisco Franco y su petición de que se hiciera tras el 10-N, lo que le llevó a señalar que no se podían arriesgar a que la derecha se hiciera con el Ejecutivo y no lo acometiera.

Así, reflexionó que “las oportunidades no solamente hay que saberlas aprovechar” sino que “un buen líder sabe adelantarlas”. Y, aunque no aludió directamente a la formación que lidera Iglesias, sí insinuó que “un partido es conveniente si sirve de algo, si no, molesta”.

UNIÓN FRENTE A UNIDAD

El dirigente socialista sostuvo que “es mentira” que la derecha quiera la “unidad”. “Ellos la unidad, nosotros la unión” porque “unidad es todo igual y único, y la unión parte del reconocimiento a la diversidad, a la pluralidad, pero queremos estar unidos”. Se trata, añadió, de dos modelos: “uno imponer, el otro el de colaborar”.

También aludió a que ningún partido presenta ninguna opción para Cataluña. Por un lado, dijo, están los que quieren “diálogo sin ley”, en alusión a los independentistas, y la derecha –en la que unió a PP y CS- porque abogan por un “diálogo sin ley”. El PSOE, reiteró, aboga por “diálogo dentro de la ley”.

Ábalos cargó contra Vox y sus manifestaciones sobre España durante la dictadura porque, recordó, España recibió su última ayuda internacional como país “subdesarrollado” en 1977 y no perdió para la OCDE esa categoría hasta 1983. Concluyó que la dictadura se aprovechó de los bienes colectivos para su riqueza personal.

Ábalos insistió en que la opción de que España prospere y avance pasa por un gobierno que lidere Pedro Sánchez, porque no puede fiarse a uno que encabeza Pablo Casado y su doble personalidad, porque igual está “hiperactivo” que va de “moderado”.

El también ministro de Fomento destacó que “por primera vez” un gobierno no prorrogará una concesión de autopista. Nunca antes un gobierno lo había hecho y lo vamos hacer con la AP7, hasta el camp de Tarragona.

El dirigente socialista defendió la posición de su partido y reflexionó si la oposición piensa que la ciudadanía es "idiota" y no tiene memoria, cuando acusan al Gobierno de haber "bloqueado". Como si el PSOE dijera a la calle: "Pensároslo otra vez, por si no habéis acertado, que no nos gusta ganar a la primera", aseveró.