Su descenso se produce por la disminución de resultados extraordinarios y de operaciones financieras, mientras que consolidó el crecimiento comercial, con expansiones del 8,6% en el crédito productivo y del 4,8% en recursos de clientes, según detalló hoy el banco a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

La progresión del crédito se apoya en un aumento del 11,9% en las nuevas formalizaciones y que permitió aumentar la cartera tanto en empresas como en hipotecas y consumo.

El saldo vivo en financiación hipotecaria creció, en concreto, al 3,4% interanual, en consumo al 10,8% y en el conjunto de la financiación a actividades productivas en un 0,9%.

Su morosidad se redujo al tiempo al 3,86%, en 2,3 puntos porcentuales. Así el volumen de dudosos se situó en 954 millones, tras disminuir en 482 millones en el último año.

Hasta septiembre efectuó además ventas de adjudicados con un valor de 370 millones, lo que implica reducir la cartera de adjudicados en un 23% en comparativa interanual.

Por el lado de pasivo, el saldo administrado de recursos de clientes aumentó a su vez un 4,8%, con expansiones del 4,7% en los recursos administrados dentro de balance y del 5,5% fuera. El banco los atribuyó especialmente al empuje del 9,4% en los depósitos a la vista, y del 11,7% en los fondos de inversión.

En cuanto a la cuenta de resultados, la evolución del negocio le permitió elevar un 3,2% el margen de intereses. Su mejora también se apoyó en un aumento del margen comercial, que se situó en el 1,59%, favorecido por la rentabilidad del nuevo crédito, que se sitúa en el 2,4%, es decir, 70 puntos básicos por encima de la media de la cartera productiva.

Por su parte los ingresos netos por comisiones recurrentes crecieron un 4,4% interanual en el trimestre, con expansiones del 7,5 y 18,9% en seguros y fondos de pensiones, respectivamente.

La cuenta cae, sin embargo, en la parte baja por la disminución del resultado por operaciones financieras en un 41% y dado que la partida de otros resultados de explotación registró una aportación negativa de 37 millones, un 165,8% superior a septiembre de 2018.

Con estos impactos el margen bruto se redujo un 4,8%, pese a su estrategia de contención de costes, y el margen de explotación disminuyó un 10,1%. En cuanto a la solvencia, el ratio de capital más exigente CET1 fully loaded aumentó en 95 puntos básicos y se situó en el 13,02%.