Así lo trasladan fuentes de la cúpula popular ante el inicio de la campaña para las elecciones generales del 10 de noviembre. “Es evidente que Sánchez está inflando, impulsando y desarrollando una estrategia para ceder protagonismo a Vox y evitar que el PP crezca”, dicen.

Según las citadas fuentes, el presidente del Gobierno en funciones estaría “utilizando” a Vox para evitar que Casado le adelante en escaños el 10-N, consciente de que la fragmentación del voto del centroderecha lastra las oportunidades del PP de gobernar.

Además, en Génova piensan que Vox es partícipe de esta estrategia porque lo que le interesa es subir unos cuantos escaños, aunque esto implique que no dé la suma para que gobierne el centroderecha. “Vox se deja utilizar para mejorar su resultado anterior”, deducen.

Dentro de esta “estrategia del PSOE para dividir el voto”, las mencionadas fuentes populares opinan que “es evidente que PSOE y Vox hablan” porque Sánchez “necesita un PP débil” y los de Santiago Abascal solo ansían escalar en su resultado electoral.

Aunque en el PP piensan que Sánchez utilizará “todos los mecanismos a su alcance” para “debilitar” a Casado, aseguran que no piensan hacer “nada” ante esta “estrategia de polarizar”. “Nos vamos a dedicar a convencer a la gente de que nosotros sabemos gestionar sus problemas mejor que los socialistas”, subrayan.