Tras hacerse pública la decisión del Consejo de Administración de General Motors (GM) de apoyar la oferta del consorcio Magna International/Sberbank para tomar una participación del 55% en Opel, el Gobierno de Aragón ha anunciado que mantendrá contactos con GM y Magna para analizar el plan de restructuración previsto por el consorcio y sus posibles repercusiones en la planta de Figueruelas.

La premisa del plan del Ejecutivo autonómico es “salvaguardar el mayor número de empleos de la factoría y asegurar su futuro industrial”, en consonancia con la posición del comité de empresa y de los representantes de los trabajadores.

Para el Gobierno de Aragón, de la información conocida hasta el momento se desprende que algunos aspectos clave como el acuerdo con los trabajadores para obtener su apoyo al plan de reestructuración o cuestiones relativas a la financiación serán ultimadas durante las próximas semanas. La propia compañía ha reconocido que comienza ahora un proceso que culminará cuando se alcancen los acuerdos definitivos en unos meses.

Los consejeros de Economía, Hacienda y Empleo, Alberto Larraz, e Industria, Comercio y Turismo, Arturo Aliaga, han reiterado el compromiso del Gobierno de Aragón con Figueruelas y con sus trabajadores, así como su intención de seguir con la máxima atención el desarrollo de las negociaciones, en estrecho contacto con el Ministerio de Industria, Turismo y Comercio.