Así lo señalaron a Servimedia fuentes del Club de Exportadores, una asociación empresarial multisectorial e independiente centrada en la internacionalización de las empresas españolas.

Los socios que forman parte del Club tienen una facturación mundial equivalente al 20% del PIB español, sus inversiones en el exterior constituyen el 50% del total de la inversión española internacional y suman unos 800.000 empleados.

Estas fuentes afirmaron que “hay violencia” en Cataluña y “problemas”, lo que “desincentiva mucho” a los inversores y a las empresas. Esta situación va a provocar que la inversión extranjera se retraiga de la región y se dirija a otras partes de España o incluso a otros países europeos, según el Club, que pronostica que continuará la marcha de empresas fuera de Cataluña por la inestabilidad.

Los últimos datos del Colegio de Registradores, publicados a mediados de octubre, cifran en 5.682 las empresas que han abandonado Cataluña entre el 1 de octubre de 2017, cuando se produjo el referéndum de independencia, y el pasado 30 de septiembre.

A este factor interno de España se suma el impacto de elementos externos como el 'Brexit' y los aranceles, que desde el Club aseveraron afecta a las ventas españolas en el exterior.

En este sentido, indicaron que las exportaciones españolas están creciendo “mucho menos” desde mediados de 2018, moderando su ritmo de avance, y también que España ha perdido cuota mundial, al tiempo que recordaron que las perspectivas de los organismos internacionales es que el comercio mundial crezca menos este año y el próximo.

El último informe de comercio exterior del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo refleja que las exportaciones españolas crecieron un 1,1% entre enero y agosto de 2019, a menor ritmo que el 4,2% registrado en el mismo periodo del año anterior o el 8,1% en 2017.

Pese a este panorama y a factores nacionales que los inversores valoran negativamente como la excesiva burocracia o la lentitud de la justicia, estas fuentes del Club subrayaron que España se ve en el exterior como un país “atractivo” para invertir.