Esta fue una de las principales conclusiones del 'I Congreso sobre el Derecho a la Autonomía Personal. Discapacidad Física y Orgánica, Envejecimiento y Cronicidad', organizado por Cocemfe y COCEMFE Cataluña esta semana en Barcelona.

Del mismo modo, los participantes pidieron que la asistencia personal forme parte de la cartera de servicios que ofrecen las administraciones públicas, y que además se contemplen y regulen los aspectos laborales, tecnológicos, éticos y formativos de estos profesionales.

También se puso sobre la mesa la necesidad de favorecer servicios personalizados con los recursos existentes teniendo en cuenta los modelos más avanzados de otros países, pero siempre en función de las peculiaridades y la idiosincrasia de nuestra sociedad.

Además, defendieron el uso de las nuevas tecnologías y una formación adecuada, a fin de acabar con las distintas brechas digitales. En esta línea, instaron a las empresas tecnológicas a diseñar sus productos y servicios bajo el paradigma del diseño universal.

Los ponentes pidieron la implicación de todos los agentes involucrados en la autonomía personal para que asuman sus respectivas responsabilidades, velen por el ejercicio de este derecho y cuenten siempre con las personas con discapacidad. Apostaron por impulsar el Marketing Social en conceptos como la autonomía personal, bajo la premisa de que "no solo atañe a la discapacidad, sino que nos interpela a todos y a todas, ya que es algo a lo que nadie querrá renunciar".

A lo largo de las dos jornadas, se mostraron ejemplos de cómo este cambio cultural ya está empezando en las escuelas, con campañas de sensibilización y visibilización en distintos ámbitos como la accesibilidad y la inclusión. Al congreso asistieron más de 500 personas, entre profesionales de la sanidad, sector asistencial, arquitectura, movilidad y tecnología; personas con discapacidad, estudiantes, entidades del tercer sector y representantes de las instituciones.