Según Cruz Roja, dicha norma debería tener rango de ley orgánica, para consolidar los avances conseguidos en este ámbito en los últimos años y proporcionar un marco de obligaciones estable, que dote de coherencia al ordenamiento jurídico actual.

También tendría que incorporar "un enfoque de derechos humanos y una clara perspectiva de género y de infancia" en todas sus disposiciones, agregó la organización, con motivo del Día Europeo contra la Trata, que se celebra este viernes.

En el primer semestre de 2019, Cruz Roja acompañó y apoyó a 362 personas en situación de trata. De ellas, 330 son mujeres, 23, hombres, seis son niñas y tres niños. Estas personas provienen de 39 países, entre los que destacan Guinea Conakry, Costa de Marfil, Nigeria, Colombia y Rumanía. La Unidad de Trata de Cruz Roja, que cuenta con 4 profesionales en la oficina central y 55 repartidos en todo el Estado, presta servicio de acompañamiento centrado en la persona durante todo el proceso en el que adquiere su independencia de nuevo.