Para lograr dicho interés requiere domiciliar haberes, que pueden ser nóminas, ingresos de autónomos o de profesionales liberales, o saldos en productos de ahorro e inversión de los titulares y fiadores, así como la tenencia de seguros, detalló este martes el banco.

En su catálogo también incluye una hipoteca con interés fijo desde el 2,35%, para el plazo de 15 años y un importe del préstamo inferior al 80% del valor de tasación.

Ibercaja ofrece igualmente un préstamo mixto con un interés fijo desde el 1,80% para un periodo inicial de diez años de contratación y posteriormente variable. En todos los casos el precio más bajo se consigue domiciliando los citados haberes.

En todas las hipotecas Ibercaja exime al cliente de los gastos de tasación, notaría, gestoría, registro y elimina la comisión de apertura.

El año pasado el banco formalizó 1.311 millones de euros en nuevas operaciones y el objetivo que apunta para este ejercicio es alcanzar los 1.500 millones de euros en nuevas hipotecas, un 14% superior al importe de 2018.