Infancia
World Vision apunta que detrás de los embarazos de adolescentes hay altos niveles de violencia y abuso

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La ONG World Vision presentó este miércoles un informe realizado en siete países de África que revela que detrás de los embarazos de niñas hay impactantes niveles de violencia y abuso. Para su realización, más de 500 niñas han compartido historias de abusos por parte de su entorno y han relatado cómo un gran número de ellas son obligadas a tener relaciones "transaccionales" debido a la pobreza extrema y el alto coste de la escolarización.
Los niños que participaron en la investigación de World Vision desvelaron que cuando las niñas quedaban embarazadas, a menudo era resultado del abuso sexual por parte de un adulto, incluidos los maestros de la escuela.
Los menores que participaron en el estudio calificaron la frecuencia de la violación, el matrimonio precoz y el trabajo sexual forzado en sus comunidades como “espantosamente alta”. Los menores, en repetidas ocasiones, sugirieron que la pobreza ponía a las niñas en mayor riesgo de violencia sexual, ya que las obligaba a tener relaciones, generalmente con hombres adultos mayores.
“Ibra era maestro de primaria. Lo conocí en la carretera cuando regresábamos de vacaciones. Tenía 28 años. Prometió que me llevaría de nuevo a la escuela después de dar a luz. Yo quería seguir estudiando. Ahora, cuando lo llamo, no responde a mis llamadas", cuenta una niña ugandesa de 17 años.
En todo el África subsahariana, las niñas consideraron el embarazo adolescente como un impedimento importante para la educación, la salud y el bienestar de sus pares. Las madres jóvenes con frecuencia sufren complicaciones de salud y casi siempre abandonan la escuela, por lo que pierden oportunidades de educación.
“Aunque la violencia y el abuso sexual son ilegales, especialmente la explotación sexual comercial y el matrimonio infantil, persisten en muchos lugares del mundo. No se está haciendo lo suficiente para hacer cumplir las leyes existentes y poner fin a las prácticas nocivas que aumentan la vulnerabilidad de las niñas", afirmó Barbara Kalimi-Phiri, asesora de género e inclusión de World Vision.
ESTIGMA Y DISCRIMINACIÓN
La organización calcula que más de 120 millones de niñas, más de 1 de cada 10 en todo el mundo, sufrirán violación o abuso sexual antes de cumplir los 20 años. Casi el 50 por ciento de las madres jóvenes entrevistadas en Ghana quedaron embarazadas como resultado de violación y/o abuso sexual.
Asimismo, World Vision asegura que las madres adolescentes también sufren el estigma y la discriminación. Casi el 70 por ciento de las niñas embarazadas entrevistadas en Sierra Leona hablaron de aislamiento social. Muy pocos países han establecido e implementado políticas para garantizar que las niñas puedan regresar a la escuela, según explica la organización.
“World Vision está trabajando para poner fin a la violencia contra las niñas y los niños y garantizar que todos tengan la oportunidad de una educación segura y accesible en más de 70 países en todo el mundo. Esto incluye establecer comités de protección infantil, trabajar con las autoridades para garantizar que el embarazo no signifique el fin de la educación de las niñas y luchar para terminar con el matrimonio infantil y el tráfico sexual infantil a través de programas comunitarios”, explicó Kalimi-Phiri.
“Sin embargo, los informes de los niños muestran que se necesita más trabajo de forma urgente para cerrar las brechas políticas que permiten que persistan los abusos contra estas niñas", concluyó la asesora de género e inclusión de World Vision.
(SERVIMEDIA)
09 Oct 2019
VMM/gja