GM ha desarrollado un método que permitirá transformar 160 kilómetros del mencionado material en plástico suficiente para fabricar piezas para ciertos componentes del motor de dicho coche, que también llevará material reciclado de neumáticos y de plástico de uso doméstico.

En el proyecto, GM coopera con Heritage Environmental, empresa que ha gestionado la recogida de las barreras de contención en el Golfo de México, y Mobile Fluid Recovery, que se ha encargado de eliminar el agua y el crudo absorbido por éstas, mientras que Lucent Polymers y GDC han preparado los materiales para poder obtener plástico a partir de ellos.

GM se ha comprometido a seguir cooperando hasta la total recogida de las barreras de contención, para lo que se podrían precisar al menos dos meses más, lo que permitirá obtener materiales suficientes para piezas de otros vehículos de la compañía.

“Si estos materiales se hubieran depositado en vertederos habrían tardado cientos de años en descomponerse, lo que habría incrementado el impacto medioambiental del vertido de crudo del Golfo de México”, ha subrayado John Bradburn, responsable de gestión de residuos de GM.