Según informó la compañía en un comunicado, la planta de desalinización por ósmosis inversa es la segunda más grande del país y dispone de capacidad para producir 250.000 metros cúbicos diarios de agua y con ello dar suministro a cerca de 220.000 personas. La inversión en este proyecto ronda los 200 millones de euros.

La planta diseñada por Sacyr Sadyt cuenta con un elevado grado de automatización que permite ajustar la producción de agua potable a los requerimientos de la empresa distribuidora Public Authority of Water (PAW)

La empresa pública Oman Power and Water Procurement Company adjudicó la concesión de la desaladora al consorcio liderado por Sacyr Agua (51%), y en el que también participan las empresas Oman Brunei Investment Company (25%) y Sogex Omán (24%).