El Gobierno descarta la congelación del Salario Mínimo

- Admite que los efectos de la reforma laboral sólo se notarán "con la recuperación económica"

MADRID
SERVIMEDIA

El ministro de Trabajo e Inmigración, Valeriano Gómez, descartó este lunes que el Gobierno vaya a proponer a los agentes sociales la congelación del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) en 2011.

En declaraciones a los medios de comunicación tras intervenir en la Comisión de Trabajo e Inmigración del Senado, Gómez afirmó que la propuesta del Ejecutivo "no será, sin duda, una elevación en forma de congelación".

No obstante, el ministro no quiso avanzar cuál será el incremento que ofrezca el Gobierno ya que considera que deben concerla "en primer lugar los interlocutores sociales".

Por otro lado, admitió que los frutos de la reforma laboral se empezarán a vislumbrar "sólo con la recuperación económica".

En su intervención en la Comisión, Gómez subrayó que la reforma del mercado laboral "no se trata de una reforma cuyos efectos positivos vayan a ser apreciados en breve".

Así, el ministro insistió en que "todavía es pronto para valorar con rigor qué papel ha desempeñado la reforma desde su entrada en vigor" ya que considera que ni el tiempo transcurrido ni el contexto económico "ayudan en ese sentido".

De esta forma, el Ejecutivo considera que aún habrá que esperar para ver los frutos de la reforma, que, según el Gobierno, supondrán una reducción de la dualidad entre trabajadores fijos y temporales, el refuerzo de los mecanismos de flexibilidad interna de las empresas y el incremento de posibilidades para los parados.

No obstante, Gómez aseguró que en los últimos meses está mejorando el funcionamiento de los contratos de fomento del empleo indefinido, que tienen una menor indemnización por despido (33 días por año trabajado) y que el Gobierno quiso impulsar con la reforma.

Según el ministro, "los contratos de fomento de la contratación indefinida están funcionando aceptablemente bien", ya que antes de la reforma suponían cerca de un 17% del total de empleo fijo y en noviembre alcanzaron el 32,5%.

En cuanto al desarrollo del diálogo social, el ministro aseguró que el Gobierno seguirá confiando en él a pesar de que, según admitió, su comportamiento en los últimos tiempos está siendo decepcionante.

“El diálogo social cumple su papel si da frutos, si no su imagen se deteriora, y ese es el momento en el que estamos”, dijo el ministro, quien añadió que la falta de acuerdos “ha situado el aprecio social del diálogo en cotas muy insuficientes”.

No obstante, reiteró que en ausencia de consenso entre los interlocutores el Gobierno tiene que seguir gobernando ya que “si el Gobierno gobierna, es la mejor forma de estimular que el diálogo funcione en el futuro, si no algunos creerán que tienen derecho de veto”.

(SERVIMEDIA)
20 Dic 2010
MFM/jrv