Pensiones

El Banco de España lamenta el periodo "bastante prolongado" sin reformas de calado en el empleo

MADRID
SERVIMEDIA

El director general de Economía y Estadística del Banco de España, Óscar Arce, señaló este miércoles que "llevamos un impasse de reformas de calado" en empleo y productividad "bastante prolongado”.

Así lo indicó Arce en la ‘Jornada Institucional Previsión 2019’ organizada por la entidad y en la que se abordó la situación del sistema de pensiones.

Este responsable del Banco de España destacó que el sistema de pensiones necesita una reforma de tal magnitud que requiere tocar la parte de ingresos y de gastos, dado que el envejecimiento de la población implicará un aumento del gasto en pensiones que alcanzará el 7% del PIB en 2035.

Si además se vuelve a vincular la actualización de las pensiones con el IPC y en ausencia de medidas adicionales, Arce indicó que supondrá un aumento del gasto de aproximadamente dos puntos porcentuales de PIB hasta 2030.

Entre las actuaciones a acometer sin dilación, Arce apuntó un plan de consolidación fiscal a largo plazo y a avanzar en reformas estructurales que permitan mejorar el empleo y la productividad. En este punto, lamentó que “llevamos un impasse de reformas de calado en estos ámbitos bastante prolongado”. También planteó políticas de inmigración “flexibles, con visión de largo plazo” y que sean “coherentes con las necesidades de nuestro mercado laboral”.

Por otra parte, la creación de empleo contribuiría, pero el director general de Economía y Estadística del Banco de España puntualizó que “seguramente no sea suficiente” para reequilibrar las cuentas de la Seguridad Social.

Arce destacó que, por la parte de los ingresos, una eliminación del tope máximo de cotización podría aumentar la recaudación a corto plazo, pero “generaría un aumento del gasto en pensiones a futuro en la medida en que las personas con salarios más elevados coticen más”.

También citó la posibilidad de aumentar impuestos, aunque puntualizó que esta medida podría afectar a toda la población, incluyendo a los propios pensionistas, y “podría tener implicaciones sobre el carácter contributivo” del Sistema.

Desde el Banco de España se señaló que habría “cierto margen” para reequilibrar las cotizaciones sociales, que superan en promedio de la UE, y la recaudación, que está "sensiblemente" por debajo del promedio.

Otra posibilidad nombrada por Arce es el ajuste de la edad de jubilación a la esperanza de vida. “Algunos países han dado pasos en este sentido” y “no es algo demasiado exótico”, afirmó. En esta línea, señaló que la reforma de pensiones de 2011, que alargaba la edad de jubilación legal progresivamente hasta los 67 años, “supuso claramente un paso en esa dirección, pero su incidencia de momento está siendo limitada porque su aplicación es gradual en el tiempo”.

En lo que respecta al ahorro complementario para la jubilación, este responsable del Banco de España indicó que existe “más margen” para favorecer un cambio en la composición del ahorro, de manera que se facilite la acumulación de activos líquidos. En este punto, se refirió a la hipoteca inversa como opción para obtener más recursos líquidos para la jubilación. Mientras, consideró que los incentivos al ahorro tienen un efecto “limitado”.

En cualquier caso, Arce avisó de que “si no se cambia la estructura del sistema impositivo, tendremos una menor base asociada a las rentas del trabajo, y en consecuencia habría un aumento del porcentaje de contribuyentes con tipos efectivos menores”.

(SERVIMEDIA)
02 Oct 2019
MMR/gja