Así lo apuntó en una entrevista en la Ser recogida por Servimedia en el día en el que en Cataluña se conmemora la jornada del 1-O de 2017. Sánchez trasladó que “aunque no quiere llegar a ese extremo”, han consultado con los servicios jurídicos y “el 155 (de la Constitución) se puede aplicar con un gobierno en funciones”.

“No habría ningún problema”, según dijo, ni de constitucionalidad ni de proporcionalidad porque el Senado, mediante la Diputación Permanente por la actual disolución de las Cortes, mantiene "plenas capacidades".

“Cataluña", afirmó, "lleva más de diez años crisis de convivencia muy intensa”, lo que requiere "mucha paciencia y mucho sosiego”. Ello le llevó al presidente a pedir al independentismo catalán que aborde la cuestión porque que "el problema no es la independencia sino la convivencia”.

El presidente no dudó en advertir al independentismo que tomará “medidas extraordinarias”, para las que buscará ir “de la mano” de las demás fuerzas políticas, si no dejan de “jugar con fuego” y no se desmarcam de la violencia pretendida de los CDR.

"No somos un Gobierno que quiera exagerar la situación ni echar más gasolina al fuego", pero se mostró contundente en que si el autogobierno de Cataluña se sitúa “fuera” de la legalidad, “el Gobierno tiene la obligación de restituir ese gobierno”. “No amenazamos, advertimos", y “vamos a permanecer muy atentos”, sentenció

En este contexto, Sánchez admitió la gravedad de la posición del presidente de la Generalitat, Quim Torra, de "amparar" algunas de las actuaciones de miembros de los CDR, porque cree que hay condenar la violencia “venga de donde venga” y máxime si se trata de las propias filas.

"Esto nos ha parecido grave”, por lo que “si hay que tomar decisiones extraordinarias en las próximas semanas, meses”, se hará buscando la unidad de los demás partidos y con “proporcionalidad”:

Aseguró que, al igual que cuando era líder de la oposición, los tres principios que le “guiarán” ante esta situación son los de: “firmeza democrática, unidad de todos los partidos y proporcionalidad”.

REQUERIMIENTO A TORRENT

Además, anunció que el Gobierno remitirá un requerimiento a la Mesa del Parlament, por permitir la tramitación de las resoluciones que impugnará ante el Tribunal Constitucional, del que no ofreció más detalles

Esta acción judicial se unirá a la impugnación de las resoluciones que el Gobierno llevará ante el Tribunal Constitucional, y que son la que insta a la Cámara catalana a liderar una respuesta institucional a la sentencia del 1-O; la que insta a impulsar un acuerdo nacional por la amnistía, la autodeterminación y los derechos civiles y políticos con petición de amnistía total; así como la que pide la salida de la Guardia Civil de Cataluña.

APOYO A LOS MOSSOS

Por otra parte, Sánchez mostró con un rotundo "sí" su confianza en los Mossos d'Esquadra y destacó que la "coordinación técnica" entre los distintos cuerpos policiales nacionales y autonómicos y con la Delegación del Gobierno en Cataluña es "extraordinariamente positiva".

Además, Sánchez expresó su deseo de que tras la sentencia del Tribunal Supremo en el juicio sobre el ‘procès’, la cuestión catalana “vuelva al territorio de la política”.

Por ello, animó a Torra, con el que bromeó que mantiene una relación epistolar, a que abra un proceso de diálogo con la otra parte de catalanes que quieren quedarse en España, un proceso al que se ayudaría desde Madrid.