El acuerdo, que tiene un plazo de duración de dos años (2020 y 2021), prorrogables por otros dos años, tiene como objetivo el sostenimiento de los referidos helicópteros, utilizados para misiones asignadas y realizadas por el Ejército del Aire en cumplimiento de aquellos fines específicos e institucionales que tienen encomendadas.

En concreto, el acuerdo tiene como fin suministrar repuestos célula para los helicópteros, suministro de utillaje para el mantenimiento y realizar el mantenimiento de tercer escalón de las aeronaves y sus componentes.

El Gobierno justifica la celebración de este acuerdo en el hecho de que el desarrollo de las misiones que tienen asignadas las unidades del Ejército del Aire se erige como un “elemento esencial” de la seguridad nacional”, por lo que se busca que cuenten con un material en “condiciones operativas”.

A ello se suma el hecho de que actualmente el Ejército del Aire “no puede absorber, por falta de medios, la totalidad de las cargas de trabajo que producen las revisiones, reparaciones y modificaciones de componentes de los sistemas de armas HD/HT.21, HT.27 y HE.25”.