Así lo trasladó en la rueda de prensa que ofreció en la sede de Ferraz tras la reunión de la Ejecutiva en la que se convocó un comité federal para el 28 de septiembre para poner en marcha toda la maquinaria electoral.

Ábalos señaló que “el tacticismo personalista de los dirigentes de PP, Ciudadanos y Podemos, “nos ha abocado a unos nuevos comicios”. El dirigente socialista aseguró que el PSOE buscará una “movilización total” del electorado “que se traduzca en una victoria rotunda, lo suficientemente amplia para evitar” que los del “bloqueo” vuelvan a “imposibilitar” un gobierno progresista.

“No hay ningún miedo a la abstención”, apuntó Ábalos, porque “cuando uno está convencido y tienes razones objetivas” es capaz de “trasladarlas al resto”. “Siento que mi propio voto no es que está humillado, es que me lo han robado”, y me siento “muy motivado porque me lo han usurpado”.

Aseguró que mantendrán las candidaturas, salvo algunos ajustes, pero que no harán ningún fichaje” porque no les hace falta ir a ningún “mercadillo ni ningún rastro” para “adornar” las listas porque les sobran referentes.

Ábalos avanzó también que solicitarán al resto de partido que hagan una campaña electoral austera y que ninguno haga, como ya ocurrió en 2016, “publicidad exterior”.

“Las pasadas elecciones tuvieron un carácter plebiscitario en torno al Gobierno de Sánchez”, un “plan contra Sánchez”, y el “resultado fue que el pueblo español decidió apoyar a ese gobierno y castigó claramente a quienes estaban contra él”.