Mujer

Carcedo invita a los profesionales sanitarios a trabajar desde la perspectiva de género

MADRID
SERVIMEDIA

La ministra de Sanidad, Consumo y Bienestar Social en funciones, María Luisa Carcedo, invitó este martes durante la inauguración de la 'Undécima edición del Diploma de Salud Pública y Género', a trabajar en el abordaje de la salud desde la perspectiva de género para evitar desigualdades.

Explicó que “es necesario profundizar en el conocimiento específico de las diferentes etapas esenciales de su vida, como la primera regla, la etapa reproductiva y de crianza y la menopausia, que condicionan su estado de salud y calidad de vida”.

Además, la ministra, que ha estado acompañada por la directora del Instituto de Salud Carlos III, Raquel Yotti, subrayó que se debe trabajar en “acciones específicas para acompañar a las mujeres en la promoción de su salud con información sanitaria y educativa de calidad”.

Asimismo, ha llamado la atención sobre la importancia de “generar un mayor conocimiento científico sobre patologías específicas que sólo sufren las mujeres, como la endometriosis, o aquellas en que la prevalencia es mucho más elevada, como por ejemplo los trastornos alimentarios, las enfermedades autoinmunes, etc.”.

Carcedo señaló que existen algunos indicadores en España que ponen de manifiesto el género como factor determinante en el ámbito de la salud. Así, aunque la esperanza de vida de las mujeres es más elevada que la de los hombres (86,2 años frente a 80,4), su esperanza de vida en buena salud es más reducida (62,6 años frente a 63,8) lo que indica que las mujeres viven más años pero lo hacen con peor salud.

En esta línea, y según la Encuesta Nacional de Salud de 2017, el porcentaje de mujeres que perciben su estado de salud como bueno es menor que en hombres (70% frente a 78%), mostrando las mujeres también más procesos crónicos que los hombres (68% frente a 60%). Alrededor del 7% de los adultos refiere padecer ansiedad crónica, aunque es el doble de frecuente que en hombres (9,1% frente al 4,3%).

Un apartado especial merece los pocos datos científicos sobre el estado de salud y la calidad de vida de la población LGTBI. “La ausencia de información es particularmente destacada en relación con las mujeres trans, personas sobre las que existe una grave preocupación, ya que muchas de ellas se encuentran en grave riesgo de marginalidad y exclusión social”, destacó Carcedo.

(SERVIMEDIA)
17 Sep 2019
MAN/gja