Así se pronunció el jefe de la diplomacia española en una rueda de prensa junto con su homólogo austriaco, Alexander Schallenberg, después de que Torra haya afirmado que si el Supremo no absuelve a los impulsores del proceso independentista de Cataluña habrá una respuesta de "camino firme a la independencia".

Borrell comentó que con Torra sucede lo mismo que con los planes de contingencia sobre el 'Brexit': que "no hay nada nuevo. Cada dos por tres dice lo mismo: si los jueces no dictan una sentencia como él quiere, hará tal o cual cosa". Esto le permitió observar que lo más conveniente es "evitar polémicas" con el presidente autonómico catalán.

No obstante, destacó que el hecho de "que una autoridad del Estado diga que no acatará una sentencia, salvo que sea la que él quiere, no lo voy a calificar".

A su vez, dijo que el Ministerio de Asuntos Exteriores está haciendo "todo lo posible por explicar a todo el mundo, empezando por nuestros vecinos y socios europeos, cuál es la situación" en torno al 'procés', una actividad en la que se ha constatado que "todos, sin ninguna excepción y vacilación, han expresado el respeto a las normas españolas y a la unidad el Estado".

Torra también comentó que "gran parte del mundo" centra su atención en la sentencia del Tribunal Supremo que se espera conocer en las próximas semanas. Sobre este particular, Schallenberg dejó claro que el desafío independentista catalán es un "asunto interno" español que se trata en el marco de su orden constitucional y aseveró que Austría ha mantenido, mantiene y mantendrá una "estrechísima colaboración con nuestros únicos interlocutores, que son los que están en Madrid".