Así lo anunció Robles, en declaraciones a los periodistas, después de visitar el Archivo General e Histórico de Defensa en Madrid, uno de los ocho archivos de la Defensa declarados Archivo Nacional.

En estas instalaciones, la ministra tuvo la oportunidad de conocer los procedimientos instruidos contra el poeta Miguel Hernández (1910-1942), el histórico dirigente socialista y presidente del Congreso durante la Segunda República, Julián Besteiro (1870-1940) y de las Trece Rosas, fusiladas en el cementario de la Almudena de Madrid el 5 de agosto de 1939.

La titular de Defensa mostró "sobrecogida" al pensar que hace 80 años en España se condenaba a muerte y se fusilaba a gente por defender unas determinadas ideas políticas. "No deja de producir una sensación dura", reconoció.

Robles aprovechó su visita a este archivo para anunciar la intención de su departamento de digitalizar un "buen numero" de los documentos clasificados en sus archivos militares.

De este modo, Defensa continuará ampliando el acceso a los archivos militares, después de que en septiembre del año pasado autorizase el acceso público a una "parte importante" de los documentos registrados en el Archivo General de Ávila y cuya fecha sea anterior al año 1968.

Esa autorización permitió por primera vez el acceso a alrededor de 500 cajas de documentos, con carácter general, sin necesidad de contar con una autorización adicional.

Ello supuso el primer paso de un proceso en el que, progresivamente, se irá autorizando el acceso público a series documentales contenidas en los distintos archivos militares.

ANTERIORES A 1968

Se trata de documentos cuya consulta no se encuentra impedida por razón legal o como consecuencia del gran volumen de documentación archivada, cuyo acceso público necesitase de un proceso técnico previo de tratamiento especializado.

Actualmente, el libre acceso a una parte importante de la documentación anterior a 1968 "no constituye ningún riesgo real para los intereses públicos y el acceso a los citados documentos no afectan ni a la seguridad ni a la defensa del Estado, como ya ha informado el Ejército de Tierra", según Defensa.

El departamento que dirigeRobles explicó que esta autorización respondía a la "demanda social" existente por conocer los documentos custodiados en los archivos histórico-militares. Este proceso se llevará a cabo "sin poner en riesgo los intereses públicos, con el principal objetivo de facilitar el conocimiento de las Fuerzas Armadas a través de parte de su historia, en la que nunca faltan hechos y obras meritorios".