Así lo revela el informe publicado este miércoles por Mastercard sobre los medios de pago para medianas empresas, es decir, aquellas que facturan entre 1 y 100 millones de euros. También revela que el 83% de las compañías que cuentan con TPV físico ya admite el pago ‘contactless’, que se refiere a abonar la cuantía sin contacto, con tarjeta o con móvil, lo que supone una subida 21 puntos porcentuales con respecto a 2017 y casi 50 puntos más que en 2015.

En cuanto a los principales motivos para aceptar el pago con tarjeta, el 85% de las compañías afirman que la razón principal es una mayor comodidad de pago y presta un buen servicio.

El segundo mayor beneficio es el hecho de que facilita las ventas, con un 65% seguido de un 58% que dice admitirlo porque lo demandan los clientes. La seguridad (30%) y la rapidez (25%) alcanzan su máximo histórico y se sitúan entre los cinco principales motivos por los que las empresas aceptan el pago con tarjeta.

En lo que se refiere al importe medio de las compras con tarjeta, se sitúa en 1.146 euros lo que supone un 125% más que las compras en efectivo. Si se compara con años anteriores, queda patente su incremento ya que la cuantía media en 2017 fue de 970 euros y de 371 euros en 2015.

MÁS CREDITO QUE DÉBITO

En lo referente al tipo de tarjeta que se utiliza en las empresas, el estudio indica en primer lugar, que el 60% de ellas dispone de alguna tarjeta, de las que el 52% prefiere la tarjeta de crédito. En segunda posición, encontramos las tarjetas de débito (23%), seguidas de las tarjetas de viaje (4%) y las de prepago (2%).

Además, señala que cada compañía cuenta con un total de cinco tarjetas emitidas de media y añade que el hecho de que no tengan costes de emisión o renovación es la razón principal de su utilización para un 49% de clientes, seguido de la seguridad y la protección antifraude que les proporcionan (27%).

Finalmente, en materia de gastos, el 10% de las compañías ha explicado que durante este año aumentó el gasto efectuado a través de la tarjeta de crédito. En ese sentido, el 62% de las empresas la utilizó para pagar viajes, el 59% para pagar comidas en restaurantes y el 57% para pagar la gasolina en los desplazamientos.