La aportación española supone así un 10,6% de los 33.000 acumulados por el vehículo con las aportaciones recabadas por la Junta Única de Resolución (JUR) de un total de 3.186 bancos y firmas de servicios de inversión en Europa.

Su puesta en marcha de lanzó para futuros rescates de entidades y el objetivo es que su presupuesto alcance, al menos, el 1% de los depósitos cubiertos en los Estados miembros que integran el Mecanismo Único de Resolución.

Para alcanzar tal dotación se fijó un periodo transitorio de ocho años, entre los años 2016 y 2023, y durante ese plazo de tiempo convivirán los compartimentos nacionales hasta que progresivamente complete su mutualización.

Con los balances actuales, alcanzar ese 1% mínimo implicaría contar con un presupuesto de aproximadamente 57.800 millones. Eso implica que se habría cubierto al 57% dicha hucha con los 33.000 millones ya aportados por las entidades europeas.

En el caso español, el centenar de entidades han realizado este año aportaciones por valor de 708 millones de euros, frente a los 735 millones del pasado año, y la suma global ingresada desde su creación alcanza los 3.500 millones, según detalló este jueves el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (Frob).

Para su dotación las entidades efectúan contribuciones a las autoridades nacionales (en el caso de España a través del Frob) en función del volumen de sus pasivos y del perfil de riesgo de cada entidad.