Aclaró después de reunirse con Trinidad que “nos oponemos” a la investidura del candidato socialista, Ángel Gabilondo, y afirmó que “no entendemos porque se comporta Cs con nosotros como si fuésemos separatistas supremacistas”. Afirmó que “se nos piden votos a cambio de nada” y recordó que Cs apoyó al PP, hace cuatro años, con un documento de 76 puntos.

Con respecto a sus negociaciones con el PP, manifestó que el “trato es correcto” y añadió que “llevamos 35 días y 35 noches esperando a firmar un papel”. Tras exponer que el citado papel se ha modificado seis veces, explicó que “estamos dispuestos” a nuevas modificaciones y agregó que “nuestros votantes son valientes por habernos apoyado”, por lo que “vamos a defender nuestras ideas” porque “no queremos mantener lo que hay y sí mejorar la vida de los madrileños”.

Insistió en que “no entendemos” porque Cs no firma ese documento y dijo que "tendremos que esperar a que pase el verano y Cs consulte a Macron”. Además, afirmó que su partido no está para “resolver problemas” de Cs, entre ellos, su “división interna” y pidió a la formación naranja “que decida donde quiere estar”.

Tras reiterar que “nuestros votos son necesarios”, insistió en pedir a Cs que “resuelva su crisis interna y defina dónde quiere estar, quizá quiere unirse con el socialismo al que tanto ataco en la campaña”.