Según informó la compañía a través de un hecho relevante remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), este pasado 15 de junio venció el plazo que LetterOne, máximo accionista de DIA con el 70% de la participación, y sus acreedores se habían dado para alcanzar un acuerdo de nueva financiación por importe de 380 millones así como de refinanciación de la ya existente.

En este sentido, DIA señala en el hecho relevante publicado esta mañana que desde el 20 de mayo de 2019 ha estado realizando “sus mejores esfuerzos para tratar de alcanzar un acuerdo” que asegure “una estructura de capital viable a largo plazo para DIA en términos y condiciones aceptables para LetterOne y la sociedad”.

Así, prosigue que “a día de hoy, aunque todavía no se haya alcanzado un acuerdo, las partes siguen en negociaciones” y que “DIA continuará trabajando con LetterOne y los acreedores sindicados para tratar de alcanzar un acuerdo lo antes posible”.

Sin embargo, advierte de que, aunque LetterOne “no ha ejercitado su derecho a terminar el ‘Lock-Up Agreement’, se reserva su derecho a hacerlo en cualquier momento si considerase que no es posible alcanzar pronto un acuerdo ejecutable que asegure una estructura de capital viable a largo plazo para DIA y condiciones aceptables para LetterOne y la sociedad”.

En caso de no alcanzarse un acuerdo por esos 380 millones de nueva liquidez y que LetterOne decida terminar con el ‘Lock-Up Agreement’, el fondo dirigido por Mikhail Fridman no llevaría a cabo la ampliación de capital de 500 millones de euros de fondos propios aprobada por la Junta de Accionistas de DIA el 20 de marzo de este año, lo que dejaría el presente y futuro de la compañía en una situación muy comprometida ante su actual situación financiera.